
26/10/2024
La Organización Mundial de la Salud refiere que el 60% de niños menores de 6 años no se encuentran estimulados.
La estimulación temprana vigila el desarrollo psicomotor de una manera integral, favoreciendo en el menor distintas áreas como la social, cognitiva, motricidad y lenguaje.
La neuroplasticidad juega un papel muy importante en la estimulación temprana ya que permite que el cerebro infantil se adapte y se reorganice de acuerdo a los estímulos externos; y no solo eso, también a rehabilitar alguna función después de alguna lesión.
Hay muchas investigaciones que demuestran que el cerebro sigue creando nuevas conexiones neuronales y alterando las ya existentes para crear nuevos aprendizajes, nuevos recuerdos.
La intervención temprana aprovecha la plasticidad cerebral al máximo, cuanto antes sea la estimulación mayores oportunidades hay de obtener un óptimo desarrollo en el menor.