10/08/2021
Ke aku, me encuentro regresando de la sierra, reconstruyéndome después de una perdida tan grande.
5 de Agosto del 2021, partió a las estrellas y está con Takauya Taviviekame, Dios nuestro creador. una de las personas más mágicas y brillantes que camino en esta tierra. Una enorme perdida para el mundo y para el pueblo Wixarika. Marakaame, hombre de conocimiento guardián de sabiduría ancestral, como su gente decía era el mas Jefe, sabia cantar para las ceremonias y durabas horas haciendo un rezo tan poderoso donde nos sumergías en el sueño del Maraakame. Cantador para la cacería donde también era el bueno para cazar, curaba, sacaba enfermedad, Jicarero, Kawitero, materializaba cuarzo, balas y billetes. Makuyeika, peregrino del mundo pues lo conocieron en todo México y en otros países. Verdaderos milagros y promesas hiciste al curar algunas que nadie creería. Y más allá de eso un ser humano excepcional.
Ne Teocari, mi abuelo, el que no hacia distinción de raza, el primero en abrir el conocimiento a los mestizos, en su comunidad aprendi que al Kakayari nos quiere a todos no importa si eres wixaritari o tewari decían. hace casi ya 20 años lo conocí, me abrió su amistad, su corazón y después su familia en donde siempre me han hecho sentir uno de ellos y se convirtió en mi Abuelo Ne Teocari y mi maestro. Primero me invito a una de las fiestas mas importantes para su cultura y me dio mi primer traje wixaritari, me integro a su comunidad y me sembró con ellos como peregrino. Ademas de todo esto me llevo a lugares sagrados donde me entrego regalos de poder físicos y metafísicos. Y curaste a mi familia un sin numero de veces. Humilde, sencillo y mal hablado, así me enseño a reírme de mí mismo y ya habiendo partido te sigo aprendiendo. Invaluable todo esto que me compartiste y no existe manera humana para pagarte por todo esto.
Pamparios Takauka por darme la oportunidad de coincidir, buen viaje en tu andar, Vuela alto como las Aguilas. ¡Te extrañare tanto!. Ne Teocari te lloran mis ojos y mi corazón, te conviertes en flores y cantos de esperanza, ya estás con los Kakayaris en la danza eterna, siempre honrare tu nombre. Marakaame de Marakate. Pamparios, Pamparios, Pamparios.