30/08/2024
La andadera:
La abuela llena de ilusión le ha comprado una andadera a Margarita, con todo su amor y las mejores intenciones.
La abuela puso a sus cuatros hijos y a un sobrino que le tocó criar en andadera, cuando eran bebés. El resultado es que los cinco caminaron muy bien y hasta corrieron y saltaron con mucha habilidad. De modo que la abuela piensa que la andadera es un magnífico regalo para su nieta que tiene 10 meses y ya se pone de pie con las piernas temblorosas.
Luego en la consulta, “el pediatra ese”, (o sea yo), dijo que la andadera es mala.
La abuela miró al pediatra ese (o sea mí), con ojos de muy pocos amigos. Digamos que con ojos de muy, muy, pocos amigos. Digamos mejor que con ojos de pi***la.
- ¡Nomás faltaba que el pediatrucho ese va a saber más que yo, que crié a cinco! – pensó la abuela - ¡Ahora resulta que no van a subir a mi nieta consentida a la andadera tan bonita con charola y todo que le acabo de comprar!
Será difícil convencer a la abuela, por eso y aprovechándome de que sé que ella ama a su nietecita, le daré dos razones y sólo dos, para que la piense, y no me odie tanto:
1.- La andadera es causa directa de accidentes graves y fatales en los niños en edad de empezar a caminar. Es una realidad estadística.
2.- Los niños de andadera tardan más en caminar que aquellos que nunca la usan. Es otra realidad estadística.
De modo que “el pediatra ese” (yo), no puede recomendar un artilugio peligroso y que retrasa la marcha. Es simple.
Estoy seguro que la abuela lo entenderá, aunque se tarde unos días.
¡Saludos!
Citas: 8711136695