23/06/2025
En los primeros años de vida, el cerebro de un niño se desarrolla a una velocidad impresionante. En esta etapa, cada mirada, cada juego y cada conversación son oportunidades para conectar y crecer.
Pero cuando las pantallas ocupan demasiado espacio en el día a día, ese desarrollo puede verse interrumpido. Diversos estudios han mostrado que el uso excesivo de pantallas en la infancia temprana se asocia con:
🔹 Retrasos en el lenguaje
🔹 Dificultades para mantener la atención
🔹 Menor interacción social
🔹 Problemas para autorregular emociones
Esto no significa que la tecnología sea mala, pero sí que debe usarse con criterio. Los niños necesitan mirar rostros reales, escuchar voces, tocar, explorar, aburrirse y crear.
📌 La American Academy of Pediatrics recomienda evitar pantallas en menores de 2 años, y limitar su uso a una hora diaria en edades preescolares, siempre con supervisión.
✨ En un mundo lleno de pantallas, regalémosles más presencia. Jugar, cantar, hablar… son pequeñas cosas que construyen grandes futuros.