16/07/2024
Había una vez un mundo donde la ciencia y la espiritualidad se entrelazaban en una danza mística. En este mundo, un honguito psilocybe cubensis mejor conocido como “Ollin Cubensis” era más que una simple seta; era un mensajero de la conciencia, un sanador de almas atribulado y un guardián de los secretos del universo.
Nuestro protagonista, un joven llamado Reyu, vivía en una pequeña aldea al pie de las montañas. Reyu era un buscador incansable de respuestas, un soñador que anhelaba comprender los misterios de la mente y el corazón. Un día, mientras exploraba el bosque, encontró un Psilocybe cubensis reluciente, sus tonos dorados destellando como estrellas en la penumbra.
Sin pensarlo dos veces, Reyu se llevó la seta a los labios y la ingirió. El hongo, como si tuviera vida propia, comenzó su viaje. Descendió por la garganta de Reyu, atravesando el estómago y los intestinos. Su esencia se mezcló con la sangre, y como un pequeño chamán intravenoso, se abrió camino hacia el cerebro.
En el hipocampo, Ollin Cubensis desplegó sus alas etéreas. Allí, reparó la mielina de las neuronas, tejido protector que había sido desgastado por el estrés y la ansiedad. Las dendritas se entrelazaron como en un baile cósmico, y Reyu sintió una claridad que nunca antes había experimentado. Sus recuerdos se volvieron más vívidos, como si el hongo hubiera desempolvado los rincones olvidados de su mente.
Pero eso no era todo. El hongo también estimuló los neurotransmisores: serotonina, dopamina y noradrenalina. Reyu se sintió inundado por una ola de euforia y amor. Las sinapsis se encendieron como luciérnagas en la noche, y su cerebro se convirtió en un jardín de fuegos artificiales. Las sombras de la depresión se desvanecieron, y la ansiedad se disipó como la niebla al amanecer.
Ollin Cubensis no solo curó a Reyu; le regaló una vía permanente hacia el bienestar. Cada pensamiento se volvió una nota en una sinfonía cósmica, y su mente se expandió más allá de los límites de la realidad cotidiana. Reyu se convirtió en un chamán moderno, un puente entre los mundos.
Desde entonces, Reyu compartió su conocimiento con otros. En su aldea, enseñó a los afligidos a conectarse con el hongo sagrado. Los ancianos encontraron paz, los jóvenes descubrieron su propósito y los corazones rotos sanaron. La ansiedad y la depresión se desvanecieron como hojas en el viento.
Y así, Ollin Cubensis se convirtió en un símbolo de esperanza y transformación. No solo reparaba la mente, sino también el alma. Reyu sonreía mientras miraba el horizonte, sabiendo que su viaje había comenzado con una seta dorada y había llevado a la humanidad a un lugar de luz y amor.
Y así concluye nuestro cuento, donde la ciencia y la espiritualidad se funden en un abrazo cósmico, y Ollin Cubensis sigue su danza eterna en los corazones de aquellos que buscan la verdad.
✨Chamanique: Una danza entre dimensiones✨
Te esperamos este 20 de Julio a las 19hrs en 📍 Centro Recreativo El Artillero, Medellín, Veracruz.
Fex Marco Antonio Trejo
Huitzil y Flor by Yuli Cacao
Raíces y Alas Editha Ruiz Juarez
Dhyana 360
Intercambio consciente: $1,888. Aparta tu lugar con $500 al WA 2291573056
¡Los esperamos siempre con mucho amor!
Clau
Ced. Prof. 6662877/12731926