09/07/2020
EL AGUA, por Jacques Collin
«No somos conscientes cuanto el agua de cual somos constituidos, nuestra agua interior, tiene una importancia enorme. Somos conscientes de que nuestra agua interior es importante, pero no sabemos porqué.
Masuro Emoto entre otros científicos, pudo demostrar que el agua tiene un poder reflector, o sea no solo de captar la información pero también de volverla a emitir. El pudo demostrar por vía de diferentes sistemas, que el agua era sensible al pensamiento, la música, las vibraciones, las ondas. La vibraciones y el pensamiento puro, significa que a partir del momento en qué hay un pensamiento, el agua va a ser sensibilizada por ello.
Significa que nosotros que somos constituidos de agua al 70%, tenemos que aprender a preservar este tesoro.
Es un resonador que está en constante comunicación con todo el cosmos.
El agua transporta inteligencia, y esta inteligencia es un poco como nuestra consciencia y que está relacionada con universos que no podemos ver.
Si queremos obtener y asimilar minerales, estos minerales deben obligariamente ser transformados por algún vegetal. Significa que los únicos minerales que vamos a poder utilizar son los de las frutas, vegetales, y agua de mar, que son biocompatibles.
Y nuestra agua interior es la autopista de toda la información de nuestro cuerpo a nivel eléctrico, electrónico, vibracional, ondulatorio, y también vía el pensamiento.
Es el agua que trae toda la información a nivel celular.
Cuando bebemos aguas minerales embotelladas, entramos informaciones negativas, van a ensuciar completamente todo nuestro organismo. De ahí vienen muchos problemas de salud.
Por ejemplo cuando la etiqueta dice 2078 miligramos por litro de residuos secos, significa que cada vez que vamos a beber un litro de esta agua, vamos a ingerir 2078 miligramos de minerales que van a venir amontonarse en nuestro cuerpo.
Cuando comparamos un ion de calcio vegetal y un ion de calcio mineral, a nivel químico no hay ninguna diferencia.
Pero, si procedemos a una electrofusionia, podemos ver que el ion de calcio vegetal tiene una corona electrónica extremadamente amplia, radiante, colorida.
Mientras el ion de calcio mineral no tiene prácticamente nada.
Nos nutrimos antes de todo de vitalidad, y esta vitalidad es dada vía un sistema electrónico.
El agua es constituida de hidrógeno, de oxígeno y un tercer elemento que es extremadamente importante para la vida: el electrón.
El agua que vamos a beber debe ser lo más pura posible. El contenido en residuos seco no debería pasar 100, o 120 miligramos por litro de agua. Mont Roucous por ejemplo tiene 18 miligramos de residuos secos por litro, es prácticamente pura, es muy diurética, es muy fluida y se puede inmiscuir a nivel celular, esto es muy importante.
Debemos hacer un especie de matrimonio con nuestra agua. El agua es algo sagrado, a lo largo de la historia hemos visto que había podido hacer milagro. El agua es capaz de hacer milagros. Cuando hablo de milagro con quiero añadir una connotación mística, cuando digo milagro no es en oposición con la naturaleza.
El milagro es en oposición con nuestra ignorancia, cuando no sabemos y no conocemos.
El agua tiene el poder de restablecer físicamente muchas cosas, a partir del momento en que nos conectamos con esta física y esta metafísica entre cuales el agua asegura el interfaz de nuestro cuerpo.
El agua capta todas estas dimensiones, y si además somos conscientes de ello, y si entramos en consciencia con esta agua, entonces ahí se van a producir milagros.
Se deben beber aguas que son vitalizadas, que hemos dinamizado.
No basta beberla pura, también hay que dinamizarla para enriquecerla a nivel electrónico. (Existen todos tipos de sistemas para hacerlo).
Porque el electrón es la pieza maestra del universo que nos permite construir todas las formas de lo viviente.
Es gracias al electrón que los atomas se asocian,que las reacciones físicas, bioquímicas, enzimáticas, se pueden realizar porque hay una riqueza electrónica.
Las aguas embotelladas que nos venden son muy pobres electrónicamente y cuando las consumimos, debilitamos, nos enfermamos, degeneramos.
Si bebemos una agua pura, vamos a obtener primeros resultados a nivel biológico.
Todas las funciones metabólicas del cuerpo se van a reactivar y salir del envejecimiento, degenerescencia.
La enfermedad es la pérdida de reacciones metabólicas, no somos más capaces de realizarlas porque ya no disponemos de esta riqueza electrónica que permite a través de parámetros eléctricos bien precisos, que se llaman la bio electrónica, permite despertar estas reacciones que solemos perder.
Es esto el agua de juventud.
El agua es el principio de vida, es gracias al agua que vivimos.
El agua es medicina.
Entrar en comunicación con esta agua, y cuando bebemos un vaso de agua, el solo hecho de pensarlo, va a concientizarla, tienen un efecto amplificador.
Entonces todo esto es un trabajo personal, no se hace el primer día de compréhension y expansión de nuestra consciencia.
Obtendrán un efecto retroactivo, lo van a sentir salud a nivel biológico, pero también los receptores se van a tornar mucho más sensibles, para recibir el pensamiento y a expresarlo.
Todo esto pertenece al mundo metafísico y nosotros somos el resultado de una sucesión de sistema informacional.
Jacques Collin es ingeniero y trabajo toda su carrera en el petróleo.
Es a la edad de 56 años que la magia del agua le fue revelada, nada lo predestinaba a esta vocación porque su cultura científica es muy general.
Es bebiendo una agua pura de muy grande calidad que entendió los efectos de la regeneración sobre el organismo y el medio celular.
El es autor de varios libros en Francés sobre el agua.
El nos revela como el agua re-sacralizada puede aporta regeneración mental, física, e intelectual. El destaca la importancia del agua como soporte de las energías electromagnéticas y de las radiaciones cósmicas.
