20/07/2025
Kiss Cam, Coldplay… y un secreto sistémico
Se hizo viral:
En pleno concierto de Coldplay, la cámara los enfoca.
Ella se voltea y se cubre el rostro.
Él baja la cabeza y se esconde detrás de las butacas.
El gesto lo dice todo: hay algo que se quiere ocultar…
y todo apunta a una infidelidad.
No es cualquier pareja.
Él es CEO de una empresa exitosa.
Ella, directora de Recursos Humanos.
Un caso mediático, sí,
pero también un reflejo de algo más profundo:
una descompensación en las leyes del amor.
Porque cuando hablamos desde la mirada de las constelaciones familiares,
sabemos que no basta con amar.
Para que una relación funcione, debe haber orden.
Y los órdenes del amor tienen sus propias reglas:
1️⃣ Jerarquía: quien llegó primero, tiene prioridad.
La primera pareja, el primer amor, la esposa, tiene un lugar que no puede ser tomado a la ligera. Si hay una segunda relación, el desorden aparece cuando se olvida lo primero, lo que fue antes.
2️⃣ Pertenencia: todos los que forman parte del sistema, pertenecen.
No importa si se les nombra o se les oculta, el sistema los incluye… y cuando se les excluye, el sistema cobra la factura.
3️⃣ Equilibrio: entre dar y recibir.
Una relación se sostiene cuando ambos aportan y reciben de forma justa.
¿Pero qué pasa cuando uno da fidelidad y recibe engaño? ¿Cuando uno ofrece confianza y recibe mentira?
En una infidelidad no solo hay un “engaño”,
hay un desorden profundo que muchas veces está al servicio de algo más grande:
— Un hijo atrapado en el drama no resuelto de sus padres.
— Una mujer que atrae infieles por lealtad a una abuela que fue amante.
— Un hombre que no logra soltar a la madre interna, y busca amantes para rebelarse en silencio.
— Un adulto que, en el fondo, aún es adolescente… que oculta, que miente, que se siente chiquito y confundido.
💬 Porque en la infidelidad siempre hay más de lo que se ve.
Y en esa imagen viral, no sólo vimos una negación del beso.
Vimos a un sistema gritando que algo está fuera de lugar.
Cuando se honra el lugar de cada quien, cuando se comprende el origen del desorden, el alma puede descansar…
y el amor, volver a ocupar su verdadero lugar.
Crecimiento Espiritual del Ser