17/10/2025
Hoy se conmemora el día internacional del Bastón Blanco.
Pude haber sacado datos y un escrito proveniente de la inteligencia artificial, pero mi intención siempre es reflejar la realidad de muchas personas dentro de la comunidad de discapacidad visual y también, mi propia experiencia.
No vine a incomodarte…
Si me ves con ese palo, andando por las calles… No vine a incomodarte.
Lamento que te estorbe, para mí, se ha vuelto como mis ojos.
Cuando voy barriendo mi bastón por la banqueta y tú tienes que hacerte a un lado o bajarte., perdón por estorbarte.
No vine a incomodarte…
Simplemente tengo que hacerlo así, con todo y los peligros que provoca ser ciego o ciega.
Si golpeo tu vehículo mal estacionado, a tu perro que me está siguiendo o a tu cancel abierto, lo lamento.
No vine a incomodarte…
Es sólo que yo no veo y tengo que tocar por donde ando.
Si al pasar por algún lugar, hago ruido con mi bastón y perturbo tu silencio, lo siento.
No vine a incomodarte…
Son técnicas que se utilizan para el desplazamiento.
Si al pasar a un lado de mí, sin querer con mi bastón te golpeo, discúlpame.
No vine a incomodarte…
Nada más estoy identificando el espacio con el que cuento.
Si me ves andar con paso torpe y desorientado y por instantes te detengo, me excuso.
No vine a Incomodarte…
Quizás apenas estoy aprendiendo.
Si algunas veces te pido ayuda para cruzar y otras veces te digo que no necesito nada y por eso te desesperas, lamento lastimarte.
No vine a incomodarte…
A veces soy más hábil o tengo más confianza y en otras ocasiones, la ciudad me aterroriza o me mata.
Si de repente un día, viniendo directamente hacia mí, no me ves y contigo me estampo, ruego tu comprensión.
No vine a incomodarte…
Yo no puedo anticiparme a lo que tengo al frente, pero tú, si puedes alejarte.
Si con la buena intención de ayudarme a caminar, agarras mi bastón y empiezas a jalarme y entonces te suelto. Permíteme expresarme.
No vine a incomodarte…
Yo puedo indicarte cuál es la mejor manera en la que puedes apoyarme.
En fin, siempre habrá una excusa para tener que disculparme.
Porque como te he venido diciendo, no vine a incomodarte…
Si supieras, si entendieras, si lo vivieras. Tal vez me comprendieras…
No quisiera andar así. Esta tierra me aterra, la sociedad me desprecia y la calle me acecha.
No quiero pelearte, no quiero despreciarte, mucho menos tengo intención de odiarte.
En serio, no vine a incomodarte...
Dame espacio, pregunta antes de ayudarme.
Déjame transitar libre, deja de reclamarme.
Mi bastón no es una varita mágica, es sólo una herramienta.
Es como tener de nuevo un par de ojos y si no lo traigo conmigo, me vuelvo más ciega.
Entonces, si cada que te cruzas conmigo, lo que hago te exaspera, Pasa de largo, no vale la pena.
Porque yo también confío y espero que tú, no has querido incomodarme.
Copyright © 2025 Marce Vázquez – Blind Delicious. Todos los derechos reservados.