05/02/2021
Gracias a por dejarme colaborar en
En medio de la incertidumbre, caos e impotencia de no saber cómo apoyar a contrarrestar esta pandemia, se me presentó la oportunidad de ser parte del equipo como nutrióloga clínica en la Unidad Temporal COVID (UTC) Centro Citibanamex, en la cual he tenido la fortuna de comprender, sentir y vivir la contingencia, de todas las formas posibles. Desde aceptar por qué cada uno llegó ahí, sin juzgar y con muchas ganas de salvar y cuidarlos para que regresen con sus seres queridos, para tratar de darles ánimo y hacerles saber que no están solos y comprendemos su frustración y miedo, ya que en ese momento somos lo más cercano que tienen a un familiar o amigo; pero sobretodo que exista la esperanza, cada vez que tocan la campana. Desde aprender con base a la experiencia y evidencia científica cómo implementar un tratamiento nutricional adecuado y precoz para así mejorar su pronóstico y evitar el aumento de desnutrición, comorbilidades y por ende el traspaso a terapias más críticas o desgraciadamente la muerte. De aceptar por qué cada día llegan más pacientes a pesar de las muertes y medidas preestablecidas por el egoísmo e ignorancia de los demás, sin pensar en el daño que le pueden causar al de al lado ni en el esfuerzo físico, emocional y mental que todos los que estamos en este sector estamos dando para que todos podamos volver sanos a casa.
Finalmente lo que me llevo de esta pandemia es qué hay que valorar cada momento y las personas que tenemos a nuestro al rededor, tanto familiares, amigos o como al compañero que está al lado, debemos aprender a ser empáticos y sensibles para saber reconocer que cada quien está pasando por momentos difíciles y podemos ayudar a evitar que se propague si fuéramos un poco más conscientes y no esperar a que tengamos algún caso cercano para empezar a tener miedo y actuar cómo se debió hacer desde un principio, y en cuanto a lo profesional me gustaría recordar a todos, que es importante saber que la humanidad es algo que no puede dejar de existir en nuestras vidas y siempre hay que ver por la salud integral de nuestros pacientes y cuidarlos como a nosotros mismos.