
20/07/2025
"Tal vez amamos mal porque confundimos el amor con una necesidad. Queremos ser amados más de lo que nos atrevemos a amar, y cuando nos entregamos, aunque digamos que no esperamos nada, sí deseamos que alguien sepa ver lo que damos sin medida. No pedimos lo mismo, pero sí que nos hagan sentir que valió la pena. A veces asfixiamos el amor con preguntas, con miedo, con dudas que buscan garantías. El problema no es esperar algo a cambio, el problema es que no sabemos qué hacer cuando no lo recibimos. Entonces nos volvemos herida, sospecha, cálculo. Quizás amar bien no sea renunciar a esperar, sino aprender a dar sin perdernos, a quedarnos sin desaparecer. El amor no debería doler tanto… o quizás sí, un poco, cuando hay discusiones, silencios o desencuentros. Porque duele lo que importa. Porque todo lo que sucede con quien amamos nos impacta, nos toca, nos mueve. El amor no debería sentirse como un examen constante, sino como un encuentro en el que el otro también elige quedarse, no por obligación, sino porque sabe que ahí, en nuestra entrega, también hay un refugio. Tal vez no es que no sepamos amar… sino que nadie nos enseñó a amar sin miedo, ni a dejar de conformarnos con un amor tibio cuando nosotros ardíamos."
-Francisco J. Zárate