17/07/2025
CUANDO VIVES CARGANDO A UN MU**TO
Es realmente increíble, descubrir de pronto en cualquier terapia ya sea de Biodescodificación o Hipnosis, que la familia, el árbol genealógico o nuestros propios padres, han programado en nosotros ser los portadores de “un mu**to”.
¿Cuántas personas en la familia han fallecido previas a que a mí me concibieran?
¿Cuántas personas en la familia han fallecido mientras mi madre estaba embarazada de mí?
¿Cuántos bebés han fallecido o bien se han perdido en la familia antes de que yo existiera?
Y de lo único que no son conscientes los padres y la familia misma, es que su gran tristeza, su gran dolor por la pérdida, ha programado en mí la orden de “darle vida al mu**to”, darle vida simbólicamente a esa persona fallecida. Ser él o ser ella. Sin estar conscientes de que la orden implica “yo no poder ser yo”.
Entonces yo llego al mundo creyendo que se trata de que yo sea feliz y de que yo disfrute, pero vivo mi vida sintiéndome vacío, me siento vacío, perdido, sin pasión por nada, me siento mu**to. Siento que yo no soy yo.
Puedo ser bipolar o diagnosticado como tal. Puedo tener cambios radicales de conducta y estado de ánimo. Porque debo ser yo, y debo ser el mu**to. Puedo vivir con ataques de ansiedad inexplicables, puedo vivir con la necesidad de “moverme” (atención choferes), vivo amando los climas fríos y nevados (porque un mu**to debe estar en hielo). Presentando bruxismo. Amando la danza y la actuación, para darle movimiento y vida al personaje “mu**to”.
Es duro, y mucho más duro resulta desconocer información al respecto en la familia. Preguntar a nuestra madre si ha tenido pérdidas antes de mi existencia. Desconocer si mi padre perdió algún hijo con alguna de sus parejas previo a casarse o unirse a mi madre.
La típica historia en la que me ponen el nombre “del mu**to de la familia” en “honor” a ella o a él.
Y todo esto viene a cuento, porque el día de ayer, por primera vez en una Biodescodificación, atendimos a un hombre que cargaba 7 mu**tos.
Él era el, por supuesto. Pero él era el bebé perdido por una neumonía cuando era recién nacido. Él era 3 bebés perdidos por su padre que en la adolescencia tuvo varios noviazgos fracasados. Él era su abuelo, padre de su padre, mismo que murió días antes de que sus padres lo concibieran. Él era el tío alcohólico que murió atropellado, gracias a que recibe su nombre. Él era la hermanita pequeña de su propia madre, misma que se cayó por las escaleras.
Él debía ser él, y además ser los siete mu**tos.
Un hombre que no sabía hacia dónde dirigir su vida, un hombre infantil y triste. Un hombre frustrado en el amor y con terror a ser padre o a formar una familia “¿Para qué?, Si los hijos “se mueren”…
Revisar su árbol, revisar sus historias, revisar su vida misma con sueños y miedos. El impactante momento en que le preguntamos: ¿Y cómo quieres ser feliz si siempre has estado mu**to?
Cuando él comprende esto, cuando él comprende que él realmente está vivo y que no sufrirá más por “culpa de otros”, cambia totalmente.
Se siente dispuesto y con gran iniciativa para soltar tantas pérdidas que no le corresponden, dispuesto a escribir la más entrañable carta de duelo. Dispuesto a vivir y a disfrutar por fin de su vida.
Su mente comprende que él no es el niño mu**to por neumonía, él no es las 3 pérdidas de su padre, él no es su abuelo y mucho menos su tío atropellado, él no es su hermanita y para rematar, siempre ha odiado su nombre.
Se va tranquilo, liberado de haber descubierto la razón de su tristeza permanente y nosotros, sin dejar de asombrarnos cuán exacta es la Biodescodificació y las constelaciones familiares cuando hay información, cuando hay detalles, cuando hay nombres y cumpleaños, cuando hay fechas y hechos.