
01/10/2024
El ojo de la mantis marina (‘Odontodactylus scyllarus’) es simplemente extraordinario.
Cada uno está compuesto a su vez de 10.000 omatidios. La banda que lo atraviesa constituye un excelente analizador del color.
Los dos ojos se combinan para formar una visión telescópica y trinocular, y localizan a la presa teniendo en cuenta la profundidad de campo y la distancia.
Las mantis perciben el ultravioleta e incluso la luz polarizada gracias a 16 tipos de células fotosensibles.
Muy agresivos pese a su pequeño tamaño, atacan a sus presas con muchísima rapidez.