
19/06/2025
Hay un concepto que siempre me ha parecido intrigante: el autosabotaje.
De entrada, el término es una contradicción en sí misma… ¿cómo podría ir en contra de mí?
Hoy leí esto:
Capítulo 3: “No es autosabotaje, es que no nos educaron para amar la incertidumbre de la vida.
Si hoy sentimos que no avanzamos, que nos detenemos o que el camino parece imposible, no significa que estemos mal. Simplemente no nos enseñaron cómo atravesar esta parte esencial del viaje. Los errores, los tropiezos, la incertidumbre, los temores, todo eso es parte indispensable de construir la vida que queremos”. – Mauricio Adiff.
Me hizo tanto sentido.
Como seres humanos, descendientes de comunidades sedentarias y gregarias, hemos aprendido que la seguridad es sinónimo de bienestar. Que solo desde la certeza podemos tomar decisiones. Pero en ese intento por sostener lo seguro, a veces olvidamos que lo que realmente nos ha hecho evolucionar como especie… es el cambio.
Y entonces, cuando titubeamos, cuando tropezamos o pareciera que elegimos “mal”, en realidad estamos respondiendo a un impulso más profundo: el de aprender, adaptarnos, transformarnos.
Quizá, aquello que llamas autosabotaje no sea más que una parte de ti intentando mostrarte otra ruta. Un desvío incómodo, sí… pero también honesto.
Te invito a que, la próxima vez que sientas que estás boicoteándote, lo mires con más compasión.
Tal vez solo estás tratando de construir, a tu manera, la vida que realmente quieres vivir.
Sofía Díaz 🖤🙋🏻♀️