La Terapia Gestalt desarrolla una perspectiva unificadora del ser humano, integrando a la vez, sus dimensiones sensoriales, afectivas, intelectuales, sociales y espirituales, permitiendo una experiencia global donde la vivencia corporal puede traducirse a palabras y la palabra pueda ser vivida corporalmente. Es un "arte de vivir", una manera particular de concebir las relaciones del ser humano con
el mundo
Favorece el contacto auténtico con los otros y con uno mismo. La Terapia Gestalt no sólo tiene como objetivo simplemente explicar los orígenes de nuestras dificultades sino experimentar y "experienciar" los indicios de las soluciones nuevas: a la búsqueda dolorosa y, generalmente, evitativa del 'saber por qué', ofrece la alternativa del 'sentir cómo', dando paso así a un proceso de movilización que favorece el cambio. La Terapia Gestalt pone el acento sobre la toma de conciencia de la experiencia actual ("el aquí y el ahora") , rehabilita el sentimiento emocional y corporal y ayuda a la Responsabilidad de nuestros actos : “Estar consciente es ser responsable. En la terapia gestalt esta palabra se usa de dos maneras: primera, somos responsables si estamos conscientes de lo que nos está sucediendo. Ser responsable significa, en parte, captar toda nuestra existencia tal como se presenta. El otro significado que nos interesa de responsabilidad, consiste en que nosotros nos hagamos cargo de todos nuestros actos, impulsos y sentimientos. Que nos identifiquemos con ellos y aceptemos todo cuanto hacemos como algo nuestro” (Latner, 2007, p. 59). Fundamentos de la Gestalt. Santiago de Chile: Editorial Cuatro Vientos.