14/04/2025
“Cuando alguien te deja, déjalo ir.”
Tu destino no está atado a quien decide irse.
No significa que sean malas personas…
Significa que su papel en tu historia ya terminó.
— Julia Roberts
A veces nos aferramos creyendo que soltar es perder.
Pero soltar también es un acto de amor propio.
No todos los que llegan están destinados a quedarse:
— Algunos vienen a enseñarte,
— otros a acompañarte,
— y unos más… a revelarte quién eres cuando te rompes.
Aferrarte al pasado solo bloquea tu futuro.
Dejar ir no borra lo vivido; honra lo que fue y da paso a lo que viene.
Sí, duele.
Duele soltar los “para siempre”,
las promesas que no se cumplieron,
y los futuros que solo existieron en tu mente.
Pero más duele quedarte donde ya no puedes crecer.
Cuando alguien se va, se abre espacio para:
— Relaciones sanas
— Nuevas oportunidades
— Y una versión más fuerte de ti
No es abandono.
Es evolución.
Así que, cuando alguien se aleje…
Agradece. Suelta. Avanza.
Tu historia no termina aquí.
Tal vez… apenas está comenzando.
