
10/07/2025
Jugar permite a los niños expresar emociones, enfrentar miedos y transformar experiencias difíciles de forma segura, El juego surge de un lugar de la mente que une la realidad con la fantasía, lo interno con lo externo, como explica el pediatra y psicoanalista Donald Winnicott. Para María Cecilia Anton, jugar es un acto de libertad y creación.
El juego no es solo diversión: es un espacio donde los niños pueden imaginar, crear y dar vida a sus miedos más grandes, sin temor. Allí pueden representar lo que les asusta o lo que no entienden, sabiendo que todo eso ocurre solo en el mundo del juego, no en la realidad.
No se trata solo de diversión, sino de imaginar, experimentar y crecer. Por eso, es esencial que los niños tengan tiempo y espacio para descansar, aburrirse y jugar libremente. Así fortalecen su creatividad, su mundo emocional y su desarrollo saludable.