23/08/2025
A todos, tarde o temprano, nos toca atravesar momentos en los que todo parece desmoronarse.
Días en los que nos sentimos cansados sin razón aparente, perdidos, como si hubiéramos extraviado el rumbo, y cada paso se vuelve incierto.
Son etapas en las que hasta lo más simple pesa, y dentro de nosotros se instala un silencioso sentimiento de vacío.
Pero estos momentos no son un error.
Son pausas necesarias, umbrales invisibles del alma que marcan el inicio de una transformación.
No hay nada de malo en sentirse perdido. A veces, es precisamente ahí, en medio del caos, donde empieza a nacer algo nuevo.
Es como si nuestra alma estuviera haciendo su cambio de estación.
Como cuando vaciamos el armario para dejar espacio a nuevas prendas: aparece el desorden, sentimos nostalgia por lo que dejamos, pero también creamos espacio para lo que está por llegar.
En esos periodos suspendidos, donde nada parece tener sentido, en realidad estamos haciendo limpieza interior.
Soltamos creencias antiguas, hábitos que ya no nos representan, pensamientos que nos aprietan como ropa que ya no nos queda.
Y sin darnos cuenta, nos estamos preparando para renacer.
Así que, si te sientes perdido, recuerda.. no estás solo.
No temas al desorden: a veces es solo el preludio del cambio.
Y cuando todo parece confuso, quizás simplemente estás mudando de piel.
✨ No necesitas tener todo bajo control. A veces, atravesar el caos es el único camino para volver a ti.