20/06/2025
Hablar de sufrimiento gusta poco. Vivirlo gusta menos, pero es una realidad que muy probablemente viviremos durante nuestra experiencia en la tierra. Por ello vale la pena dedicar un rato a reflexionar sobre él, como personas que acompañamos procesos de terapia y crecimiento de otr@s,
El sufrimiento en su dimensión filosófica, se entiende como una experiencia humana fundamental y como una confrontación con la finitud de la existencia. Busca su naturaleza, si acaso tiene sentido y cómo abordarlo. Si bien no siempre se trata de que el sufrimiento deba tener sentido en sí mismo, abordarlo implica cuestionarnos las formas como lo vivimos y lo que hacemos con ello, dado que también, esto podría llevarnos a la autocomprensión, examinar más nuestra vida y quizá a un crecimiento interno, la plenitud espiritual en la búsqueda de la virtud. (Aunque no todas las perspectivas filosóficas coinciden con esto).
Desde la Psicología, el sufrimiento puede ser el resultado de un padecimiento de índole física, emocional, mental, espiritual, derivado de experiencias de pérdida, insatisfacción, duelo, stress, ansiedad, depresión por mencionar solo algunos.
A la vez que personal, es una experiencia general, ante la cual como terapeutas, podemos desarrollar formas de acompañarlo con nuestr@s pacientes, a través de herramientas como la presencia, la escucha activa, la compasión, el compromiso, el contacto humano que se da por la relación dialogal en terapia. Te invitamos a conocer más sobre estas posibilidades en el seminario!!!