13/07/2020
DURANTE LA CANÍCULA, PRECAUCIONES A TOMAR EN LOS NIÑOS.
El fenómeno conocido como canícula inició en México este 14 de julio, lo que quiere decir que los días más calurosos del año ya comenzaron. La exposición a estas elevadas temperaturas puede provocar efectos nocivos sobre el organismo de diversa gravedad como:
Stress por calor: Son las molestias físicas y psicológicas asociadas a la exposición a elevadas temperaturas. Hablamos de decaimiento, fatiga o irritabilidad, muchas veces derivadas de un peor descanso nocturno.
Agotamiento por calor: Debido a la pérdida de agua y/o sales que no han sido repuestas adecuadamente, generalmente a través del sudor, van a aparecer una serie de signos y síntomas que incluyen: intensa sed, debilidad, mal estado general, ansiedad, vértigo, mareos y dolor de cabeza.
Golpe de calor: Es la situación más grave consecuencia del calor y requiere ayuda inmediata al ser potencialmente mortal. Los signos y síntomas que podrían presentarse son: temperatura corporal elevada por encima de los 40º C, piel caliente, enrojecida y seca (sin sudor), dolor de cabeza, náuseas, somnolencia, sed intensa, confusión, convulsiones y pérdida de conciencia.
Prevenir cualquiera de las complicaciones derivadas de la exposición a estas altas temperaturas es fácil, por lo que le sugerimos estos sencillos consejos.
Durante estos días, debemos evitar salir a la calle con los pequeños en las horas más calurosas. Si no hay más remedio que hacerlo: gorra o sombrero en mano, vestidos con ropas ligeras de colores claros y tejidos naturales, protección solar en las zonas expuestas. No olvidemos permanecer a la sombra siempre que sea posible. Y nunca, por mínimo que nos parezca el tiempo, se debe dejar a un niño solo dentro de un vehículo expuesto al sol.
La protección solar en los niños deberá ser siempre muy alta (FPS +50) y efectiva frente a todos tipos de rayos solares nocivos: UVA, UVB e infrarrojos. Se evitará la exposición directa al sol de los menores de 3 años.
Es fundamental mantener una buena hidratación, ofreciendo y bebiendo agua a menudo, aunque no se sienta sed. Evitar las bebidas muy azucaradas, pues van aumentan la pérdida de líquidos, así como las bebidas muy frías. Para comer, aumentaremos el consumo de frutas de verano y verduras frescas, que nos ayudarán a mantener una buena hidratación y recargarán el cuerpo de las sales minerales perdidas a través del sudor.
Si necesitas una consulta con especialista de Pediatría te invito a reservar tu cita a través de nuestro sitio web. https://www.doctoralia.com.mx/z/IEr3h2
Teléfono: 998 124 0684