18/01/2024
⬇️⬇️⬇️
La tos se queda…
¿A qué viene este comentario?
A que la llamada más frecuente que estoy recibiendo estos días es más o menos así:
“Fíjese doctor, que vio Tomasito la semana pasada. Me dijo que tenía catarro común, que era una infección viral y le dio paracetamol, y etcétera… Tomasito ya está bien, ya no tiene fiebre, come bien y anda haciendo travesuras pero sigue con tos, ¿se lo tengo que volver a llevar?”
Yo diría que no.
La tos se queda, como ya les digo:
Después de una rinofaringitis o de una infección de vías respiratorias viral, cuando el chamaco ya se siente bien, la tos es lo último que se les quita. Siguen tosiendo, pero ya están bien. Las vías respiratorias tardan un poco en acabar de mover todas esas secreciones que todavía andan por ahí. No es necesario ni conveniente darle jarabes para la tos. Esa tos irá cediendo poco a poco, en dos o tres semanas andará perfectamente bien. Esa es la buena noticia. La mala es que luego de ese tiempo lo atrapará otra infección igual o parecida. Ni modo, así crecen.
¿Cuándo debo preocuparme por la tos?
- Si la tos duele. Es decir, si cuando tose, el niño tiene dolor en el pecho.
- Si la tos provoca el vómito. Se llama tos ‘emetizante’ y será mejor revisar.
- Si al toser el niño se pone azul o morado. Es tos ‘cianozante’ y es una señal de que algo anda mal. Hay que atenderla siempre.
- Si la tos se presenta en accesos (ataques), sobre todo si impide comer, dormir o descansar.
- Si la tos se presenta o se exacerba en presencia de ejercicio.
- si la tos tiene un tono raro, como de foca o de perro. Como una cornetita. Es la tos traqueal o metálica. Hay que atender.
- Si se acompaña de otros signos o síntomas, como fiebre o dificultad para respirar, que desde luego no es de lo estamos hablando aquí.
Consejo: a mí sí me sirve que mis pacientes me manden un audio de la tos del bodoque. O un video.
Pregunta a tu pediatra.
La tos no se debe tomar a la ligera. Pero si el niño no está decaído, corre, come, juega, duerme, y no presenta otros datos, en general no hay razón para alarmarse.
Mantén al niño bien hidratado. Eso funciona mejor que los jarabes, los cuales por cierto, no han demostrado su eficacia.
¡Saludos!