14/10/2025
En la literatura de luna y prácticas rituales (guías de luna, libros y astrología práctica) hay un hilo común: la luna gobierna ritmos y ciclos; por analogía se aplica al cabello (plantas, siembras, cosechas).
Fase creciente - Estimular crecimiento y vitalidad
La fase creciente simboliza crecimiento y desarrollo. Se aconsejan programar cortes ligeros o recortes estratégicos al inicio de la fase creciente para favorecer un crecimiento más vigoroso y rápido. En la práctica popular se interpreta por analogía con la jardinería lunar: cuando la luna “crece”, las savias suben; aplicar esa metáfora al cabello produce la recomendación de cortar para crecimiento.
Luna llena - Fuerza, brillo y recorte de mantenimiento
La luna llena representa la cúspide energética. En muchos manuales se recomienda la remoción de puntas dañadas y tratamientos que “fijen” la fuerza (mascarillas fortalecedoras). La creencia sostiene que el cabello cortado o tratado en plena luna retomará mayor brillo y fortaleza. Esto se usa especialmente para rituales de aspecto y presentación (bodas, eventos).
Luna nueva — Renovación y tratamientos profundos
La luna nueva es el punto cero, la semilla invisible. En textos de lunarismo se recomienda reservar este momento para tratamientos que “inicien” una nueva etapa: mascarillas nutritivas profundas, cortes simbólicos (para “soltar”) o comienzo de rutinas de fortalecimiento. Se trabaja la intención: “renuevo la salud del cuero cabelludo”.
Fase menguante — Poda, ralentizar crecimiento y mantenimiento
La fase menguante se asocia con liberación y disminución. Recomendación tradicional: cortar si quieres que el cabello crezca más despacio (menos visitas a la peluquería), o para “recortar con propósito” (quitar peso, limpiar daño sin estimular nueva densidad).
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