04/11/2021
11 señales y síntomas del trastorno de ansiedad
Muchas personas experimentan ansiedad en algún momento de su vida.
De hecho, la ansiedad es una respuesta bastante normal a eventos estresantes de la vida como mudarse, cambiar de trabajo o tener problemas financieros.
Sin embargo, cuando los síntomas de ansiedad se vuelven más significativos que los eventos que los desencadenaron y comienzan a interferir con tu vida, podrían ser señales de un trastorno de ansiedad.
Los trastornos de ansiedad pueden llegar a ser debilitantes, pero es posible controlarlos con la ayuda adecuada de un profesional médico. Reconocer los síntomas es el primer paso.
Aquí te presentamos 11 síntomas comunes de un trastorno de ansiedad, y cómo reducir la ansiedad de forma natural y cuándo buscar ayuda profesional.
1. Preocupación excesiva
Para ser considerada una señal de trastorno de ansiedad generalizada, la preocupación debe estar presente la mayoría de los días por al menos seis meses y ser difícil de controlar.
La preocupación también debe ser grave e intrusiva, afectando la habilidad de concentrarse y realizar las tareas diarias.
2. Sentimientos de agitación
Cuando alguien se siente ansioso, parte de su sistema nervioso simpático se potencia.
Esto desencadena una serie de efectos en todo el cuerpo, como un pulso acelerado, palmas sudorosas, manos temblorosas y boca seca.
Estos síntomas ocurren porque el cerebro cree que ha percibido un peligro y comienza a preparar el cuerpo para reaccionar ante la amenaza.
El cuerpo desvía la sangre del sistema digestivo hacia los músculos en caso de que se necesite correr o pelear. También aumenta el ritmo cardíaco y agudiza los sentidos.
3. Intranquilidad
Cuando alguien se siente intranquilo, a menudo lo describe como sentirse “nervioso” o con una “incómoda necesidad de moverse”.
4. Fatiga
Fatigarse fácilmente es otro síntoma potencial del trastorno de ansiedad generalizada.
Este síntoma puede ser sorprendente para algunos, ya que la ansiedad se suele asociar con hiperactividad o agitación.
En algunos casos, la fatiga puede provocarse después de un ataque de ansiedad, y en otros, la fatiga puede ser crónica.
No está claro si la fatiga se debe a otros síntomas comunes de ansiedad, como insomnio o tensión muscular, o si puede estar relacionada con los efectos hormonales de la ansiedad crónica.
5. Dificultad para concentrarse
Muchas personas con ansiedad informan que les cuesta concentrarse.
Cuanto peor era su ansiedad, mayores eran sus dificultades.
Algunos estudios muestran que la ansiedad puede interrumpir la memoria funcional, un tipo de memoria responsable de retener información a corto plazo. Esto puede ayudar a explicar la disminución dramática en el desempeño que las personas suelen experimentar durante los períodos de mucha ansiedad.
6. Irritabilidad
La mayoría de las personas con trastornos de ansiedad también experimentan irritabilidad excesiva.
Según un estudio reciente que incluyó a más de 6,000 adultos, más del 90% de las personas con trastorno de ansiedad generalizada reportó sentirse muy irritable durante los peores momentos de su trastorno de ansiedad.
Dado que la ansiedad está asociada con una alta agitación y preocupación excesiva, no es sorprendente que la irritabilidad sea un síntoma común.
7. Músculos tensos
Tener músculos tensos la mayoría de los días de la semana es otro síntoma frecuente de ansiedad.
Si bien puede ser común tener los músculos tensos, no se entiende completamente por qué se asocia con la ansiedad.
Es posible que la tensión muscular como tal aumente la sensación de ansiedad, pero también es posible que la ansiedad conduzca a una mayor tensión muscular, o que la causa de ambas sea un tercer factor.
8. Dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido
Los trastornos del sueño se relacionan fuertemente con los trastornos de ansiedad.
Despertarse en mitad de la noche y tener dificultad al conciliar el sueño son los dos problemas más comunes.
Si bien el insomnio y la ansiedad están estrechamente vinculados, no está claro si el insomnio contribuye a la ansiedad, si la ansiedad contribuye al insomnio, o ambos.
9. Ataques de pánico
Un tipo de trastorno de ansiedad, llamado trastorno de pánico, está asociado con ataques de pánico recurrentes.
Los ataques de pánico producen una sensación de miedo intensa y abrumadora que puede llegar a ser debilitante.
Este miedo extremo suele estar acompañado por ritmo cardíaco rápido, sudoración, temblores, falta de aliento, presión en el pecho, náusea y miedo a morir o perder el control.
Los ataques de pánico pueden ocurrir de manera aislada, pero si ocurren con frecuencia e inesperadamente, pueden ser una señal de trastorno de pánico.
10. Evitar situaciones sociales
Es posible que muestres señales de un trastorno de ansiedad social si encuentras que:
Te sientes ansioso o temeroso por las situaciones sociales que se aproximan
te preocupa que otros te juzguen o examinen
sientes temor de ser avergonzado o humillado delante de otros
evitas ciertos eventos sociales debido a estos temores
Las personas con ansiedad social pueden parecer extremadamente tímidas y calladas cuando están en grupo o al conocer gente nueva. Si bien podrían no parecer angustiados por fuera, por dentro sienten miedo y ansiedad extremos.
Esta actitud de distanciamiento a veces puede hacer que las personas con ansiedad social parezcan presumidas o poco amigables, pero el trastorno se asocia con baja autoestima, alta autocrítica y depresión.
11. Temores irracionales
Los temores exagerados sobre cosas específicas, como las arañas, los espacios cerrados o las alturas, podrían ser una señal de fobia.
Una fobia se define como ansiedad extrema o miedo a un objeto o situación específica. La sensación es lo suficientemente intensa como para interferir con tu capacidad de funcionar normalmente.