07/03/2023
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ANTHONY HOPKINS: EL AUTISTA QUE NO ALARDEA DE SU AUTISMO. (AUNQUE BIEN PODRÍA HACERLO)
Anthony Hopkins nació en 1937 en Port Talbot, una sombría ciudad siderúrgica del sur de Gales. Sus días escolares fueron improductivos; prefirió sumergirse en el arte, como pintar y dibujar, o tocar el piano, que dedicarse a sus estudios.
“Yo era bastante estúpido en la escuela. Tal vez tenía dislexia. No podía entender de qué hablaba todo el mundo. Yo era un niño pequeño rebelde. No sabía lo que estaba haciendo la mayor parte del tiempo. Me metieron en el internado porque no sabían qué más hacer conmigo. Entonces, mi historial escolar fue pobre y creo que eso genera en cualquier niño mucha ira y soledad”
Hopkins, que se describe a sí mismo como un "im***il antisocial", era propenso a la grosería y la bebida.
En estos días, Hopkins rara vez habla de su pasado borracho, los dos matrimonios fallidos (con la actriz Petronella Barker y la asistente de producción Jennifer Lynton) y su hija (Abigail, ahora de 48 años, a quien solo ve esporádicamente).
Ha estado sobrio desde el 29 de diciembre de 1975, el día en que se despertó en Arizona sin tener idea de cómo había llegado a la ciudad del desierto. Ese día asistió a su primera reunión de Alcohólicos Anónimos .
“Bueno, me han diagnosticado Autismo, pero soy de alto funcionamiento. Muchas personas con Asperger son muy funcionales, pero inconsistentes. Tienen tics nerviosos, hábitos nerviosos, pensamiento inconsistentemente obsesivo”.
También dice de él mismo "soy muy solitario... No voy a fiestas, no tengo muchos amigos...". cuando se le pregunta a Hopkins si cree que el síndrome de Asperger lo ha ayudado como actor él asiente con la cabeza. " Definitivamente miro a las personas de manera diferente . Me gusta deconstruir, desarmar un personaje, descubrir qué es lo que los motiva y mi punto de vista no será el mismo que el de los demás". Sir Anthony, sin embargo, dijo que la gente ha "arruinado el sistema humano tabulando todo".
Reconocido por su capacidad para recordar líneas, Hopkins mantiene su memoria ágil aprendiendo cosas de memoria, como poesía y Shakespeare. Siendo amigo de Steven Spielberg, Hopkins asombró al equipo con su memorización de un discurso de siete páginas en la sala del tribunal y lo pronunció de una sola vez. Incluso su papel como Hannibal Lecter, considera que tuvo toques de su personalidad autista para lograr un rol inolvidable.
En una entrevista cerró con esta frase: "He cometido muchos, muchos errores en mi vida, pero ¿me arrepiento de alguno? No. No me arrepiento de la ira, no me arrepiento de haber bebido. La vida puede sé dolorosa, es dolorosa para todos y ese es el trato. Mi lema es supéralo, supérate a ti mismo, haz lo mejor que puedas por el tiempo que puedas".
Fuentes: https://www.scottpsychologicalservices.com/
Revista GQ, Washington Post, ExpressCo.Uk
