Todos los niños y niñas desde la infancia hasta la adolescencia, suelen experimentar algunos tropiezos en el camino del crecimiento y la maduración. Aunque cada hijo es diferente y especialmente dentro del ámbito familiar, algunas veces, surgen emociones, pensamientos, sentimientos y conductas no deseadas que causan conflictos no sólo a ellos, sino a quienes los rodean. Las familias y otros adultos responsables se preocupan cuando niños y adolescentes tienen dificultades para enfrentar y resolver conflictos de su realidad cotidiana que los llevan, por ejemplo, a sentirse tristes, dejar de dormir, alterar sus hábitos alimenticios o a dejar de interactuar bien con su familia y amigos. Los problemas emocionales y/o de conducta son los motivos principales para realizar un estudio médico-psicológico integral que evalúe el riesgo que representan para continuar de manera normal el proceso de desarrollo y crecimiento. En el proceso de evaluación se requiere de varias entrevistas al niño o adolescente y de la familia con el equipo de trabajo de NUCPA, paralelamente se solicita información adicional a otras personas relacionadas con el niño, como el pediatra, el médico de familia, el personal de la escuela y otros familiares. El estudio se forma con la descripción de los problemas y síntomas actuales del niño o adolescente; la información acerca de su salud, enfermedades y tratamientos previos; los antecedentes médicos de la familia; el historial de desarrollo del niño, datos de su desempeño en la escuela, así como de su relación con los amigos y el núcleo familiar. Después de algunas entrevistas diagnósticas y de evaluación clínica, el psicologo especializado en niños y adolescentes integra todos los datos y, de acuerdo a cada caso, propone realizar exámenes de laboratorio, radiografías especiales, pruebas psicológicas, educativas y de atención, evaluación del lenguaje, escritura y lectura. De acuerdo a estos resultados parciales, se puede pedir interconsulta con otros servicios como los de Neurología, Neuropsicología, Nutrición y Terapia Física. El Psiquiatra especialista en niños y adolescentes se reúne con el equipo de trabajo de NUCPA, para analizar, discutir los resultados e integrar un reporte en el que se describen los conflictos del paciente. Con base en el reporte, se ofrece un diagnóstico a los padres, que proporciona de manera comprensible, tanto las recomendaciones de cuidado, como un plan específico de tratamiento. Durante la evaluación surgen muchas dudas, entre ellas: ¿cómo se verá la familia afectada al terminar el proceso? ó ¿si alguien es culpable de lo que sucede? Es importante resaltar que la evaluación médico-psicológica es un procedimiento que se pone al servicio no sólo del niño y el adolescente, sino de su familia, y que producirá los mejores resultados si se cuenta la participación de todos los involucrados. Algunos de los problemas más frecuentes por tratados en NUCPA son: el déficit de atención e hiperactividad (TDAH), ansiedad, el uso de alcohol o dr**as, depresión, problemas escolares académicos y de conducta, el divorcio y sus consecuencias, entre otros.