
10/05/2025
A TI, MAMÁ DE LUZ QUE TRABAJAS CON LA TRR Y ERES GUÍA Y SANADORA DEL CAMINO DE MUCHAS PERSONAS
En este día que honra a la madre, celebramos también a todas las que, desde el amor y la TRR, abrazan el alma de otros para guiarlos hacia la responsabilidad, la verdad y el despertar. Ser madre es mucho más que dar vida: es acompañar el nacimiento del ser.
Hoy, en el día de hoy, consagrado a las madres, no solo honramos la vida que diste, sino también la vida que tocas y transformas. Celebramos a la madre que arropa con amor a sus hijos biológicos, y también a aquella que, trabajando con la TRR, ha elegido acunar el alma de quienes aún son niños por dentro, sedientos del consejo, del abrazo, y de la silenciosa sabiduría de una madre que sabe amar más allá de la sangre.
Tú, que con manos de amor y alma de fuego, acaricias lo invisible y siembras esperanza donde antes hubo dolor.
A ti, mamá que abrazas la TRR como un faro entre las sombras, que has elegido mirar el alma más allá del llanto y convertir cada herida en puente, cada lágrima en semilla de sonrisa.
Tú no solo crías hijos, tú despiertas generaciones cuando acompañas procesos y bendices trayectorias. Tu labor es sagrada, porque sanas lo que el tiempo dejó sin nombre, porque te atreves a mirar hacia dentro y enseñar que el amor puede reescribir cualquier historia.
Eres medicina viva, eres templo y tambor, eres la voz de la ternura que no se rinde y el eco de una humanidad más consciente.
Hoy te honramos, hoy te damos las gracias, no solo por ser madre,
sino por ser madre del alma de muchos, por seguir el camino de la TRR con valentía, verdad y compasión.
Sigue brillando, sigue sintiendo, sigue guiando, porque gracias a ti,
cada vez más lágrimas se convierten en sonrisas y cada vez más corazones recuerdan que la sanación es posible y que empieza, como tú, con amor.
Feliz Día, Mujer Medicina. Feliz Día, Mamá de Luz. Gracias por estar.