08/08/2025
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La progresión de la Enfermedad Renal Crónica (ERC), implica una relación alterada entre los riñones y el intestino. Las alteraciones de la microbiota, conocidas como disbiosis urémica e intestino permeable, contribuyen a la progresión de la ERC.
El eje riñón-intestino, implica la acción de hormonas intestinales como la grelina e incretinas y el impacto de la absorción de toxinas urémicas sobre la función renal.
En la ERC, disminuyen los microorganismos intestinales productores de ácidos grasos de cadena corta (SCFA), esto exacerba la progresión de la enfermedad. Estudios han informado que, además de un aumento en las bacterias productoras de toxinas urémicas, hay una reducción en las poblaciones de especies productoras de SCFA, como Prevotella, Lactobacillus y Bifidobacterium.
Referencia actual que explora la evidencia de nuevas estrategias, enfocadas en mejorar la disbiosis y reducir las toxinas urémicas producidas por bacterias intestinales en la ERC.
Wakino S, et al. (2025)
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC12195966/
