11/05/2025
¡Feliz día a todas las MADRES! (Con mayúscula, porque ser madre es algo tan grande que merece escribirse así). Esta publicación podría ser válida no solo para el Día de la Madre, sino también para el Día del Maestro, el Día del Amigo o el Día del Trabajo, porque con mi mamá nos unen lazos que van más allá de la familia.
Desde niño, siempre admiré su habilidad como artista en todo lo que hacía: imágenes, restauración, comida (de hecho, podría haberse dedicado a la gastronomía con éxito, al punto de que mis amigos de la universidad y del colegio venían a mis cumpleaños más para probar sus platillos que para celebrar al cumpleañero), moda, decoración... En fin, tantas cosas. Sin embargo, lo que siempre la apasionó fue el tejido, que sigue practicando a sus 76 años.
Como decía, lo que soy ahora nació de la admiración de verla trabajar, algo que de niño me parecía inalcanzable. Viéndola, sin saberlo ni pretenderlo, aprendí sobre materiales, calidades y gusto. Una palabra que puede sonar abstracta, pero como ella dice: "Hay que hacer las cosas con gusto".
Si ya éramos muy unidos, el trabajo nos unió aún más, especialmente al planificar las cosas juntos, afrontar las vicisitudes de toda empresa y ser un apoyo mutuo. Entiendo que para muchas personas, las relaciones con sus padres no van más allá del ámbito familiar, o incluso que no se llevan bien. Algo que he oído más a menudo de lo que esperaba. En ese sentido, me considero afortunado y bendecido por todo lo que hemos logrado con mi madre.
¡A propósito! Para los que no la conocían o no se dieron cuenta, la de la foto es mi mamá. ¡Feliz día a todas las mamás!
¡Casi me olvido! si por visitar a la mamá con sus hijos y al final del día los nietos le rompieron los adornos de la abuelita o sus santitos, ¡no se preocupe! Eso tiene solución. Visítenos en Av. Sáenz Peña 1467 - Callao (a la altura del cruce con la Av. Guardia Chalaca junto al grifo Energigas). Contáctenos al 689-2368 / 420-0002. Whatsapp 999 910 277.
Somos un taller con más de cien años de tradición familiar restaurando todo aquello que los nietos rompieron en la casa de sus abuelitas.