El Secreto de los Factores de Transferencia
En el 1988, David Lisonbee hizo un descubrimiento que cambió la manera en que pensamos acerca de la salud. Él descubrió que los sistemas inmunitarios saludables tienen algo en común. Este elemento común sorprendentemente no es una vitamina o un mineral ni un ácido graso o ninguna otra sustancia nutricional. El elemento común entre los sistemas inmunitari
os saludables y fuertes es una dosis diaria de Transfer Factor. Al investigar una referencia a una patente poco conocida, David Lisonbee se dio cuenta que los expertos nutricionales e investigadores científicos habían estado buscando un respaldo para el sistema inmunitario en el lugar equivocado. Aunque estos expertos estaban escudriñando el mundo por fuentes nutricionales exóticos para respaldar la función inmunitaria, la nutrición solo
era parte de lo que el sistema inmunitario necesitaba. Para un funcionamiento óptimo, el sistema inmunitario necesitaba información de una manera desesperada y la información se encontraba escondida en una pequeña molécula con el nombre interesante del factor de transferencia. Las moléculas de los factores de transferencia se encuentran en el sistema inmunitario de cada criatura viviente. Estas moléculas son la manera natural de pasar la información inmunitaria de la madre a su infante y se pasan por medio de la primera leche materna (por ejemplo, el calostro de la vaca). Además las nuevas células inmunitarias regeneradas necesitan ser educadas inmediatamente y los factores de transferencia continúan sirviendo como educadores del sistema inmunitario de por vida. Los factores de transferencia se descubrieron por primera vez en el año 1949 por el Dr. Sherwood Lawrence, ex – inmunólogo principal de la universidad de Nueva York (NYV), pero su descubrimiento estuvo muy adelantado a su tiempo y fue a parar en un estante de una biblioteca. Los co-fundadores innovadores, David y Bianca Lisonbee sacaron la única licencia de la patente existente del factor de transferencia en ese tiempo, asegurándose de que T.F. tuviera exclusividad y los derechos para extraer los factores de transferencia.