En el año 1981 la congregación de los hermanos Benedictinos, conjuntamente con el apoyo del Ministerio de Salud, emprendieron el camino del Centro de salud San Benito, a la cabeza de este gran proyecto estaba la enfermera Hermana Ana María Pinar, jefa del Centro de Salud San Benito, con la visión de hacer de éste una institución que trabaje en la prevención, la recuperación y la ayuda a los más necesitados de la comunidad.
La mayoría del personal que aquí trabajaba pertenecía al Minsa, pero había un gran apoyo, no sólo humano y espiritual sino también económico de parte de la congregación.
Por ese tiempo, aproximadamente en el año 1991, llegó a trabajar por aquí la Sra. Amanda Cerna y un par de meses después la Srta. Belinda Veintemilla, ellas tiene trabajando en San Benito 25 años.
Por iniciativa de la Hermana Ana, la parroquia puso en funcionamiento el Comedor Parroquial, dando almuerzo a los niños con algún problema alimentico o desnutrición, incluso se visitaba a los colegios nacionales cercanos. También funcionaba en la parroquia un botiquín en donde atendía una conocida nuestra, la sra Loli Gonzales, ella participaba en el Comité de Acción Social de la parroquia, en donde no sólo hacían catequesis y coro, sino también apoyaban en campañas de salud, aquí encontramos a otra conocida, la sra. Teresita Cóndor, quien era promotora de salud y apoyaba en el Centro de Salud cuando requerían su apoyo, en su mayoría campañas.
Trabajaron aquí, personas muy recordadas y con mucho aprecio, como son la hermana Ana María Shapell, médico y la hermana Mauricia enfermera encargada de TBC.
Al pasar los años, el personal del Minsa, en su mayoría los nombrados, atendían a pocos pacientes y de mala manera, los hacían esperar demasiado sin atención, grandes colas, y al final les decían que ya se acabaron los cupos para las consultas. La hermana Ana tenía una constate lucha para controlar todo esto, luego la hermana Ana falleció, el Minsa comenzó a administrar el Centro, y todo fue empeorando, los valores cristianos con los que los padre Benedictinos había fundado San Benito su fueron perdiendo.
La congregación Benedictina se tuvo que retirar por falta de vocaciones y los padres que tenían aquí eran ya muy viejitos, por ese tiempo llegaron los padres de la congregación Carmelita de María Inmaculada.
Así fue como en el año 2001, el Padre Mateo CMI, párroco, observó los problemas que existían en el Centro de Salud San Benito, lo comunicó al consejo parroquial y se tomó la decisión de terminar el convenio con el Minsa y volverlo parroquial, se llamaría así “Centro de Salud Parroquial San Benito” con una atención más humana, con calidez y calidad.
Durante varios meses, se hizo el traspaso, el Minsa reubicaría a su personal, fueron tiempos de muchos problemas y conflictos, el personal que trabajaba para el minsa trató de impedir el cambio, desprestigiando a los padres, diciendo que atentaban contra la salud de la comunidad y hasta diciendo calumnias de ellos a los vecinos.
Se buscó personal nuevo, en las misas se ponía avisos, la idea era mantener la espiritualidad y la identidad de San Benito, “Orar y laborar”.
Así fue como llegaron las Sras. María Liendo, Beatriz Guzmán, Gladys Montes, Loli Gonzales y Teresa Cóndor. A demás de Amanda Cerna y Belinda Veintemilla quienes continuaron sus labores después que se fue el Minsa, conjuntamente con el Dr. Cruz, recordado Médico Jefe y la Sra. Julia, ella con su experiencia ayudó mucho a las actuales técnicas ya mencionadas.
Al inicio todo empezó con mucho entusiasmo, al personal sólo se les daba para los pasajes, pero trabajaban con muchas ganas de salir adelante. La recordada hermana Betty, encargada de enfermería, propuso el color celeste para hacer el uniforme para el personal técnico, ella entregó estos uniformes en una ceremonia en la que el padre Mateo los bendijo, desde ese momento el personal trabajaría con la bendición de Dios.
Al principio este edificio sólo contaba con dos pisos y fuimos creciendo, en el 2007 categorizamos para volvernos Policlínico, luego se hizo un tercer piso y luego el cuarto. Pasó a llamarse desde ese entonces “Policlínico Parroquial San Benito”.
Hoy en día con más de 15 años como institución parroquial, hemos crecido y contamos con más de 20 especialidades al servicio de la comunidad…