24/12/2021
La Navidad es por excelencia la época del año de paz y felicidad, de reunirse en familia para celebrar. Sin embargo, para las personas que tienen un familiar enfermo o que falleció, puede ser un momento del año muy doloroso. Todo lo que tenemos a nuestro alrededor invita a divertirse, a celebrar, a compartir la alegría, y sin embargo para quien han sufrido una pérdida recientemente, este ambiente de fiesta contrasta con la tristeza que se siente y el dolor que se sufre.
Si tu o alguien en tu familia se siente identificado y te preguntas ¿qué debo hacer? Pues primero debes saber que no hay una respuesta correcta a esta pregunta: cada duelo es único existen diferentes maneras de vivir el dolor por una perdida. A continuación, te dejo algunos consejos para que sepas afrontar estas fiestas de una manera resiliente:
-Permítete sentir lo que sientes, acepta tus emociones: puede que sientas tristeza, dolor o desgano; no se trata de hacer como si nada pasó, sino de aceptar las emociones y darles su espacio. Ten en cuenta que quizá no estas para celebrar nada, pero si para estar con las personas que amas
-Respeta y no juzgues a los demás: cada quien gestiona su duelo de manera diferente, por ello respeta el espacio de cada miembro de la familia
-Adapta las fiestas al contexto actual: no tiene que ser una celebración ni una fiesta, es un momento de compartir en familia y de estar en unidad
-Honra a las personas que ya no están: haz un pequeño homenaje como una vela prendida o una silla vacía para tener presente aquel familiar
-Ten en cuenta la ilusión de los más pequeños: celebrar navidad como si nada hubiera sucedido después de la perdida de un familiar es poco saludable, los niños también experimentan el dolor de la ausencia; sin embargo, no celebrar navidad en absoluto también puede resultar desilusionador para un niño. Los adultos deben servir como modelo para expresar el dolor de una forma asertiva sin dejar de lado la ilusión de la navidad
Ps. Juan Francisco Gárate
CPSP 26828
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