11/08/2025
✨️👉La vitamina D puede llamarse "vitamina", pero el cuerpo la trata como una potente hormona esteroide que regula todo, desde la inmunidad hasta la expresión genética.
A pesar de su nombre, la vitamina D no es técnicamente una vitamina. En términos científicos, ahora se reconoce como una hormona esteroide, lo que la coloca en la misma categoría bioquímica que otras hormonas de gran impacto como la testosterona, el estrógeno y el cortisol. ¿Su origen? Al igual que estas hormonas, se deriva del colesterol. Cuando la piel se expone a la luz solar, inicia la producción de vitamina D, que luego experimenta un proceso de conversión de dos pasos en el hígado y los riñones para convertirse en calcitriol, su forma hormonal activa.
Aquí es donde la cosa se pone interesante: una vez en esa forma activa, el calcitriol se une a los receptores de vitamina D (VDR) dentro de las células e influye en la expresión genética, activando o desactivando ciertos genes. Esto significa que la vitamina D no solo ayuda a los huesos y a la absorción de calcio, sino que también desempeña un papel clave en la regulación de la respuesta inmunitaria, la inflamación, el equilibrio de fosfato e incluso el crecimiento y la reparación celular.
Aunque siempre se ha pensado que se obtiene de la luz solar y de suplementos, la vitamina D es mucho más que un simple nutriente. Es un agente hormonal completo que orquesta procesos biológicos cruciales a nivel celular. La exposición diaria al sol podría estar alimentando uno de los sistemas hormonales más subestimados del cuerpo.