13/08/2024
El fin de semana tuve la oportunidad de compartir momentos inolvidables con personas maravillosas y vencer el gran miedo que le tengo a la altitud de Cusco con su famoso “soroche”.
El miedo 😖 es una emoción que me impulsa mucho y que me ha ayudado a enfrentar y sacar mis recursos emocionales y mentales ante diversas situaciones. A pesar de que veces me ha generado ansiedad, nerviosismo o impulsividad, el miedo es una emoción importante para mí.
Cusco para mí era “¡No!” “Con él no puedo”. Muchas personas me contaban su experiencia y lo que habían superado, pero mi cuerpo-mente-emoción decía NO.
Pero esta vez me movía algo mucho más grande. Este deseo, que nació el año pasado, de querer llevar aquello que sé y hago durante muchos años -y ahora en mi centro - a otros lugares. Fue así que uno de mis proyectos, llamado Cusco, se puso en marcha. Con muchas postergaciones y pretextos, pero aun así comenzó a despegar.
No la pasé bien. La altura me chocó y estuve 🤦🏻♀️ , casi al punto de ir a emergencia y cancelar los talleres de alineamiento de chakras, constelaciones y las citas ya agendadas. Pero el Universo me envió seres maravillosos. Las hermanas del Colegio María Auxiliadora, donde se realizarían estos eventos, me cuidaron, me ayudaron y fueron pieza clave para superar este mal de altura. No puedo dejar de mencionar a mi pequeña –bueno, ahora joven- hija, quien me cuidó, se encargaba de comprar y que tome las medicinas y estar al tanto de todo.
Ahora, aun con miedo, pero en menor grado, iré poco a poco superándolo y, tal como les prometí a las personas que participaron en estas actividades, regresaré a Cusco en octubre.
Recuerden: casi todos tenemos un miedo que nos detiene. Para otros puede ser insignificante, pero para uno es muy difícil de manejar. Lo importante es darle un lugar, aceptarlo y poco a poco y a su tiempo podrás superarlo… como en este momento me toca a mí.
Que tengas un lindo día ❤️
Vero