01/05/2025
DÍA DEL TRABAJADOR EN EL PERÚ: ENTRE EL SIMBOLISMO Y LA REALIDAD
El 1 de mayo en el Perú no es solo una fecha de conmemoración, sino un recordatorio de las contradicciones profundas que enfrenta la clase trabajadora. Mientras el discurso oficial celebra el "esfuerzo laboral", millones de peruanos sobreviven en la precariedad, atrapados en un sistema que reproduce desigualdad y explotación.
LA PARADOJA DE LA CELEBRACIÓN EN UN PAÍS INFORMAL
- Más del 70% de los trabajadores peruanos están en la informalidad, sin derechos laborales, sin seguro de salud, sin sueldos dignos.
- El Estado y las élites empresariales romantizan el "emprendimiento" (vender en las calles o por redes sociales, haciendo delivery) como solución, cuando en realidad es una forma de encubrir la falta de empleo decente.
- ¿De qué sirve un día feriado si la mayoría no tiene estabilidad laboral?.
EL SALARIO MÍNIMO: UNA BURLA A LA DIGNIDAD
- El salario mínimo en Perú (S/ 1,025 ≈ US$ 270) es insuficiente para cubrir la canasta básica familiar (que supera los S/ 3,800).
- Las grandes empresas (mineras, agroexportadoras, retail) se oponen a aumentos bajo el argumento de que "afectaría la competitividad", mientras sus utilidades crecen.
- ¿Cómo se puede hablar de "día del trabajador" si el sueldo no alcanza ni para lo esencial?.
DESIGUALDAD ESTRUCTURAL: EL TRABAJADOR COMO ENGRANAJE DESCARTABLE
- La pandemia dejó en evidencia que los "héroes" (personal de salud, repartidores, vendedoras) son los mismos que el sistema abandona.
- Mientras las grandes fortunas de los más ricos siguió aumentando, los trabajadores perdieron empleos, salarios y hasta sus vidas por falta de protección.
- ¿Es el 1 de mayo una farsa en un país donde el trabajador vale menos que las ganancias de unos pocos?.
Entonces el 1 de mayo sigue siendo un día de lucha y reflexión en Perú, no solo de festejo y huasca.