24/06/2025
Felicidades a mi linda gente de la Selva 🇵🇪
Cada 24 de junio, la selva peruana se llena de música, color y tradición para celebrar una de sus festividades más emblemáticas: la Fiesta de San Juan. Es una fecha profundamente esperada por las comunidades amazónicas, no solo por su raíz religiosa —en honor a San Juan Bautista, el santo patrono de la Amazonía—, sino también por su conexión con la naturaleza, la cultura y el sentido de comunidad.
La fiesta es una mezcla de fe, identidad y alegría. Las celebraciones empiezan desde la madrugada con baños en los ríos, que simbolizan la limpieza del alma y la renovación espiritual. Se cree que en este día las aguas están bendecidas por San Juan, y sumergirse en ellas trae buena suerte y protección.
Pero ningún San Juan estaría completo sin el protagonista gastronómico del día: el juane. Este plato típico, envuelto en hoja de bijao, está hecho a base de arroz, gallina (o pollo), huevo cocido y aceituna. Su forma redonda representa la cabeza de San Juan Bautista, y su preparación rinde homenaje a la unión entre lo sagrado y lo cotidiano.
Comer juanes en San Juan no es solo una costumbre: es un acto de identidad, un símbolo de pertenencia, un momento de encuentro familiar y comunitario. En cada casa, en cada pueblo, en cada feria, los juanes se comparten con orgullo, como un recordatorio de nuestras raíces amazónicas y del calor humano que define a la selva.
San Juan no es solo una fiesta. Es una declaración de amor a la tierra, a las costumbres que nos unen, y a ese sabor que solo el juane puede dar.