14/11/2022
LA SUMA Y NARRACIÓN DE LOS INCAS, JUAN DE BETANZOS 1551-1558.
La crónica “Suma y Narración de los Incas”, fue escrita a pedido del virrey Antonio de Mendoza, Betanzos no participó en los hechos de Cajamarca, probablemente llegó a nuestras tierras 2 años antes de la muerte de Pizarro del cual fue traductor, puesto que se afirma conocía el quechua, luego de la muerte de Pizarro apoyó a Gonzalo Pizarro y al ver que este perdería la guerra civil entre invasores españoles se pasó al bando del Rey, y por estas acciones fue “Premiado”, recibiendo tierras y una renta mensual.
Es preciso recalcar que esta crónica sólo fue conocida en copia del original “Es importante conservar en la memoria el hecho de que posiblemente, algunos de los aspectos de su obra, desde los más nimios o superficiales, como la repetición de una palabra al copiar, hasta los de más consecuencia como el añadido de alguna aclaración o información o la actualización de la información allí contenida, pueden no ser del autor” (Lydia Fossa).
La crónica fue publicada hace 138 años, esta habría sido elaborada con información de “Primera mano” (lo mismo se dice de Garcilaso sin embargo hay contradicciones entre ellos), se dice que Pizarro le entregó como esposa a una prima de Atawalpa con la que previamente él había tenido 2 hijos y como mencionamos Betanzos “Conocía” la lengua ganándose la “Confianza de la familia Real”, siendo ellos quienes le contarían la “historia” que el reproduce.
“El relato de Betanzos es áspero, rústico, pobre de lenguaje” (Raúl Porras).
“En general, podemos decir que el autor nos ofrece una visión retrospectiva de los hechos, proyectando hacia el pasado los antecedentes de los hechos que fueron importantes en el presente del autor. Es así que pensamos que Betanzos organiza el pasado para que coincida, explique y justifique el presente y le reporte mercedes en el futuro” (Lydia Fossa).
Betanzos participó como escribano en la “Declaración de los Quipucamayocs” al Gobernador Vaca de Castro en 1542, por lo que es probable que el cronista haya utilizado como fuente este documento oficial, siendo para Lydia Fossa La Suma y Narración y la Declaración de los Quipucamayocs: “Dos versiones del mismo documento, dos redacciones de la misma fuente… las dos versiones presentan a los nativos como seres incapaces de gobernarse a sí mismos, enzarzados en una guerra fratricida, en la que ha salido triunfante el usurpador, Atahualpa”, al que después Francisco Pizarro ejecuta.
Betanzos, a la muerte del Virrey Mendoza, ofrece sus servicios al Virrey Hurtado de Mendoza, quien lo incluye en la comitiva que ofrecería el perdón a Sayri Tupac: “y ansi se partio el dicho Juan de Betanzos para la montaña donde los Yngas alzados”.
La crónica está dividida en dos partes “La Suma”, de una sola hoja que contiene una lista de “Gobernantes” Inkas y la “Narración” es la totalidad del texto que compone la crónica:
“En cuanto a la tematización de los personajes, la primera parte generalmente presenta a los Inkas como constructores, gente ocupada en erigir una civilización. La segunda parte, más bien, parece ser un alegato en favor de la tesis de la tiranía de los Inkas. Los Inkas aparecen como aguerridos, sanguinarios combatientes, no dan muestras de piedad, más bien de salvajismo y crueldad, terminando siendo representados como partícipes e instigadores de varias barbacoas humanas, de las que Betanzos nos proporciona hasta la receta de la preparación, Los Inkas de la Primera Parte reciben potajes exquisitos en vajilla de oro; los de la Segunda Parte comen carne humana (cocida) y carne de tigre (puma?) cruda, Parece ser que Betanzos quiere contribuir con su granito de arena, o con su gotita de tinta, a hacerle más llevadera la carga de conciencia que aqueja al Rey de España por la invasión violenta de los conquistadores y la explotación de los colonizadores” (Lydia Fossa).
Betanzos es contemporáneo de Cieza de León, quien sí publicó su crónica en vida, al menos la primera parte, según las informaciones de los mismos “hispanistas” y como ya hemos mencionado Betanzos nunca vio su crónica publicada puesto que el virrey que se la encargó murió antes de que él la terminara, es un tal Jiménez de la Espada, el mismo que bautizó a Cieza como “Príncipe de los cronistas”, quien publica esta crónica en 1880, Jiménez de la Espada en su oportunidad fue condecorado con la medalla de oro otorgada por el gobierno peruano por “Su labor en pro de la divulgación de la cultura incaica”, una “cultura incaica” occidentalizada.
“En los tiempos antiguos, dicen ser la tierra é provincia del Perú escura, y que en ella no había lumbre ni día. Que había en este tiempo cierta gente en ella, la cual gente tenía cierto Señor que la mandaba y a quien ella era subjeta Y en estos tiempos que esta tierra era toda noche, dicen que salió de una laguna que es en esta tierra del Perú en la provincia que dicen de Collasuyo, un Señor que llamaron Con Tici Viracocha, el cual dicen haber sacado consigo cierto número de gentes, del cual número no se acuerdan. Y como este hubiese salido desta laguna, fuese de allí á un sitio ques junto a esta laguna, questá donde hoy día es un pueblo que llaman Tíaguanaco, en esta provincia ya dicha del Collao; y como allí fuese él y los suyos, luego allí en improviso dicen que hizo el sol y el dia, y que al sol mandó que anduviese por el curso que anda; y luego dicen que hizo las estrellas y la luna. El cual Con Tici Viracocha,dicen haber salido otra vez antes de aquella, y que en esta vez primera que salió, hizo el cielo y la tierra, y que todo lo dejó escuro; y que entonces hizo aquella gente que habia en el tiempo de la escuridad ya dicha; y que esta gente le hizo cierto deservicio á este Viracocha, y como della estuviese enojado, tornó esta vez postrera y salió como antes habia hecho, y á aquella gente y á su Señor, en castigo del enojo que le hicieron, hízolos que se tornasen piedra luego.
Así como salió y en aquella mesma hora, como ya hemos dicho, dicen que hizo el sol y dia, y luna y estrellas; y que esto hecho, que en aquel asiento de Tiaguanaco, hizo de piedra cierta gente y manera de dechado de la gente que después habia de producir, haciéndolo en esta manera: Que hizo de piedra cierto número de gente y un principal que la gobernaba y señoreaba y muchas mujeres preñadas y otras paridas y que los niños tenían en cunas, según su uso; todo lo cual ansí hecho de piedra, que lo apartaba á cierta parte; y que él luego hizo otra provincia allí en Tiaguanaco, formándolos de piedras en la manera yadicha, y como los hobiese acabado de hacer, mandó á toda su gente que se partiesen todos los que él allí consigo tenia, dejando solos dos en su compañía, á los cuales dijo que mirasen aquellos bultos y los nombres que les habia dado á cada género de aquellos, señalándoles y diciéndoles: éstos se llamarán los tales y saldrán de tal fuente en tal provincia, y poblarán en ella, y allí serán aumentados; y éstos saldrán de tal cueva, y se nombrarán los fulanos, y poblarán en tal parte; y ansí como yo aquí los tengo pintados y hechos de piedras, ansí han de salir de las fuentes y rios, y cuevas y cerros, en las provincias que ansí os he dicho y nombrado; é iréis luego todos vosotros por esta parte (señalándoles hacia donde el sol sale), dividiéndoles á cada uno por sí y señalándoles el derecho que deba de llevar.”
Estos párrafos tienen una remembranzas del Génesis de la biblia, fuente principal de todos los cronistas para escribir nuestra historia, nos habla de un creador del día, de las estrellas de la luna y del sol, de que hubo un castigo por un “deservicio” y luego que hizo de piedra a las gentes, Betanzos presenta una secuencia organizada de hechos, que explicaría el origen de los Inkas, puesto que más adelante se llega a la fundación del Cusco, es evidente la intención de “Organizar” una historia occidentalizada, estas narrativas no encuentran correlato por ejemplo en la iconografía, no se reprodujo en ningún caso en cerámica, textiles, madera o piedra estos relatos de los hermanos saliendo de cerros o lagunas, a la fecha no se ha reportado ningún hallazgo material que contribuiría a darle validez a la narrativa de Betanzos.
El cronista Betanzos fue el primero que escribió sobre los orígenes y la fundación del Cusco, escribió la leyenda de los hermanos Ayar, según argumenta, él tomó esta versión de los familiares de su “Esposa” y que a la vez el mismo lo traducía al conocer la lengua, los hermanos Ayar en esos relatos podrían representar comunidades migratorias poseedoras de nuevas tecnologías, se dice que llevaban semillas y que se quedaban un año en diferentes lugares hasta que llegaron a Cusco y que Alcaviza el Kuraka de Cusco, los recibió al comprender que poseían una mejor ciencia y que esta los beneficiaria, encontramos aquí algo de coherencia con el desarrollo de nuestras comunidades, este sería el procedimiento que los Inkas utilizaron para integrar a otras comunidades y así formar el Tawantinsuyo.
Se sabe también que Garcilaso de la Vega en sus comentarios reales desarrolla la leyenda de Manco Capac y Mama Ocllo, se tendría que considerar que los comentarios reales se publicó 45 años después que Garcilaso Salió de Cusco, pero estuvo ahí hasta 1560, Betanzos dice que ya para 1551 había comenzado a escribir su crónica, es posible que esta versión-leyenda de los hermanos fundadores se haya hecho conocida en esos tiempos y por otro lado se sabe que el mismo Garcilaso se valió de “fuentes”, estando en España, para escribir sus comentarios.
El cronista habla de “Señores” o Capac Inca y en su cronología este cargo se hereda de padres a hijos tal cual las monarquías europeas, sin embargo la Sra. Maria Rostworowski en la adenda al Libro Pachacutec publicada 50 años después de la presentación de la primera edición, admite que fue un error haber seguido a los cronistas puesto que el Inka Wiracocha no era padre del Inka Pachacutec sin embargo el cronista afirma en el relato del “enfrentamiento” donde Pachakutec vence a los Chankas que pretendían “invadir” Cusco, que su “Padre” Wiracocha, había “huido” a las alturas de Calca y que planeaba una emboscada y matar a su hijo porque lo “aborrecía” o no era su favorito para sucederlo en el cargo según sus “informantes, sin embargo para Garcilaso no fue Pachakutec quien “venció” a los Chankas si no Wiracocha.
Betanzos Incluye en la Suma y Narración a Yamque Yupague, de quien desciende Cuximiray Ocllo, la que luego se conoce como Angelina Yupangue, esposa de Betanzos:
“La inclusión de Yamque Yupangue, entonces, en la Suma y narraçion es necesaria para explicar la posterior aparición de Cuxirimay Ocllo y dejar constancia por escrito de su estrecho parentesco con Huayna Capac y con Atahualpa. Es posible que no haya inventado a los personajes, pero sí que los haya ubicado en posiciones de poder, destacadas, para facilitar su asociación con la princesa Inka, Tomemos en cuenta, también, que los contenidos de los documentos oficiales, como el de Juan de Betanzos dirigido al Virrey Antonio de Mendoza, tienen la potencialidad de ser considerados como prueba o probanza, cuando ello sea necesario. Esto es especialmente importante cuando se solicitan mercedes a cambio de servicios, como lo hace explícitamente Betanzos en su último capítulo, o se esperan restituciones de tierras y repartimientos, como el autor a través de su esposa nativa, Angelina Yupangue, estrechamente vinculada a la nobleza Inga, como lo prueba Betanzos.” (Lydia Fossa).