14/09/2025
𝐋𝐚 𝐓𝐫𝐢𝐥𝐥𝐚 𝐓𝐫𝐚𝐝𝐢𝐜𝐢𝐨𝐧𝐚𝐥 𝐞𝐧 𝐔𝐬𝐪𝐮𝐢𝐥: 𝐔𝐧 𝐋𝐞𝐠𝐚𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐓𝐫𝐚𝐛𝐚𝐣𝐨 𝐂𝐨𝐦𝐮𝐧𝐢𝐭𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐲 𝐂𝐮𝐥𝐭𝐮𝐫𝐚.
En las alturas de la serranía de La Libertad, especialmente en el distrito de Usquil, se mantiene viva una tradición ancestral que une a las familias y celebra el esfuerzo colectivo: la trilla de trigo, cebada y arverja. Esta práctica, cargada de historia y simbolismo, es mucho más que un método de cosecha; es un ritual de identidad, cooperación y alegría que refleja el espíritu comunitario de los pueblos andinos.
𝗘𝗹 𝗣𝗿𝗼𝗰𝗲𝘀𝗼: 𝗘𝗻𝘁𝗿𝗲 𝗕𝘂𝗿𝗿𝗼𝘀, 𝗖𝗮𝗯𝗮𝗹𝗹𝗼𝘀 𝘆 𝗲𝗹 𝗥𝗶𝘁𝗺𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗧𝗶𝗲𝗿𝗿𝗮
La trilla es una actividad agrícola que consiste en separar los granos de las espigas de cereales como el trigo, la cebada y a veces la arverja. Se realiza en un espacio abierto llamado parva, donde se extienden las espigas sobre mantas para evitar que se pierda ni un solo grano. El proceso comienza con el pateo o trilla de burros o caballos, guiados por una persona que los dirige en círculos sobre las espigas, desgranándolas con el peso y movimiento de los animales.
Una vez que los granos están sueltos, entra en acción la horqueta, una herramienta similar a un tenedor de madera, con la que los ayudantes lanzan al aire la mezcla de granos y paja. Aquí, el viento se convierte en un aliado natural: arrastra la paja ligera, mientras los granos, más pesados, caen de nuevo sobre las mantas. Para completar la limpieza, se usan escobas de mano, barriendo con destreza para asegurar que solo queden los granos puros.
𝗟𝗮 𝗠𝗶𝗻𝗴𝗮: 𝗧𝗿𝗮𝗯𝗮𝗷𝗼 𝗖𝗼𝗺𝘂𝗻𝗶𝘁𝗮𝗿𝗶𝗼 𝘆 𝗖𝗲𝗹𝗲𝗯𝗿𝗮𝗰𝗶ó𝗻
La trilla no es una labor solitaria. Se lleva a cabo mediante la minga, una forma de trabajo comunitario donde familias y vecinos se reúnen para ayudarse mutuamente. Esta jornada se acompaña de música tradicional, que marca el ritmo del trabajo y llena el aire de alegría. Además, no puede faltar la chicha de jora, bebida ancestral que refresca a los participantes y fortalece los lazos entre ellos.
𝗨𝗻 𝗩í𝗻𝗰𝘂𝗹𝗼 𝗰𝗼𝗻 𝗹𝗮 𝗧𝗶𝗲𝗿𝗿𝗮 𝘆 𝗹𝗮 𝗖𝘂𝗹𝘁𝘂𝗿𝗮
Esta costumbre, arraigada en la serranía de La Libertad, es un testimonio de la sabiduría campesina y la conexión con la naturaleza. Más que una técnica agrícola, la trilla es una fiesta del campo, donde se transmiten valores como la solidaridad, el respeto por la tierra y el orgullo por las raíces. En Usquil y caseríos , la trilla no solo alimenta los cuerpos, sino también el alma de una comunidad que preserva su herencia con cada grano cosechado.