13/11/2025
¿Qué es la inmadurez marital? ¿Como detectarlo y manejarlo?
Es la incapacidad de una o ambas personas dentro del matrimonio para asumir las responsabilidades emocionales, comunicativas y relacionales que requiere una relación adulta y saludable.
No significa ser “malo”, sino no haber desarrollado todavía habilidades clave como manejo de emociones, resolución de conflictos, responsabilidad afectiva o compromiso mutuo.
En términos simples es un matrimonio donde uno o ambos actúan desde impulsos infantiles, miedo, dependencia o egoísmo, en lugar de una madurez basada en respeto, estabilidad y crecimiento.
¿Cómo detectar la inmadurez marital? Puedes reconocerla cuando aparecen patrones como:
1. Evadir responsabilidades:
- Culpar siempre al otro.
- Negarse a admitir errores.
- No seguir acuerdos o compromisos.
2. Comunicación impulsiva o pobre:
- Hablar desde la ira, callar por inmadurez o castigar con silencio.
- Reaccionar sin pensar.
- No expresar emociones de manera adulta.
3. Falta de control emocional:
- Cambios extremos de humor.
- Reacciones exageradas ante problemas pequeños.
- Conductas pasivo–agresivas.
4. Expectativas irreales:
- Esperar que el otro adivine lo que siento.
- Creer que el matrimonio debe fluir sin esfuerzo.
- Pensar que amar es suficiente sin trabajar la relación.
5. Dependencia emocional o necesidad constante de aprobación:
- Celos excesivos.
- Miedo al abandono.
- Necesidad de ser validado todo el tiempo.
6. Dificultad para resolver conflictos:
- Atacar, huir o guardar resentimientos.
- Repetir siempre las mismas discusiones sin llegar a acuerdos.
Consejos prácticos para mejorar la relación
1. Trabajar la comunicación adulta:
- Usar frases como: Siento…”, “Necesito…”, “Me gustaría que…”
- Evitar ataques, sarcasmos o generalizaciones (“siempre”, “nunca”).
2. Practicar responsabilidad afectiva:
- Reconocer errores sin justificarlos.
- Validar emociones del otro aunque no se esté de acuerdo.
3. Establecer acuerdos claros:
- Expectativas sobre tareas, horarios, convivencia, finanzas, intimidad.
- Mantener rutinas y compromisos que fortalezcan la estabilidad.
4. Trabajar en la inteligencia emocional:
- Aprender a pausar antes de reaccionar.
- Identificar y expresar emociones sin culpar.
- Practicar autocontrol.
5. Fomentar el crecimiento individual:
- Hacer terapia individual o de pareja.
- Leer, educarse sobre relaciones.
- Desarrollar hobbies y vida personal que aporten al matrimonio.
6. Buscar la unidad, no la perfección:
- Recordar que la madurez no es no fallar, sino estar dispuesto a crecer juntos.
Dr. Giovanni Alomar Sastre
Psicólogo Clínico