29/06/2025
https://www.facebook.com/share/p/16q8touaqM/
Esta imagen, tomada quizá en un hospital o consultorio, nos confronta con una de las verdades más olvidadas —y necesarias— en la práctica médica:
“Cuando veas un paciente, acuérdate que la enfermedad ya lo está tratando demasiado mal como para que tú también lo hagas.”
No es solo un cartel. Es un recordatorio directo, sencillo y poderoso de lo que significa cuidar.
Quien llega a un centro de salud no viene buscando juicios, indiferencia ni impaciencia. Llega cargando dolor, miedo, incertidumbre… y merece ser recibido con humanidad.
Este mensaje es una invitación a no endurecernos con el tiempo, a no dejar que la rutina borre la compasión. Porque detrás de cada número de historia clínica, de cada síntoma o diagnóstico, hay una persona que ya está lidiando con lo peor: sentirse vulnerable.
El profesional de salud no solo sana con medicamentos o intervenciones. Sana también con el tono de su voz, con una mirada amable, con la forma de explicar, de acompañar y de estar presente.
—
Que nunca se nos olvide: lo humano también cura.