31/12/2021
El 2021 terminó y todo es así, la vida es un cambio constante. Cada final es un nuevo comienzo; no se como fue tu año, las veces que te equivocaste, si te toco sufrir, si reíste o lloraste o, si cumpliste tus metas, pero debemos agradecer por todo.
Las tristezas, el dolor y las tormentas no ayudan en nuestro crecimiento y en la perfección de nuestro carácter, y si fue un año extraordinario hay que disfrutarlo.
Una forma bonita de iniciar el año es soltando todo lo que no nos permite avanzar, dejar de preocuparse por cosas que no tienen solución y enfocarse en las que sí, soltar, y dejar que Dios nos sorprenda. Nunca es tarde para cambiar y nada es tan bueno que no se pueda mejorar.
Mi deseo para este año es que tengan salud mental, que tomen la decisión de perdonar y ser felices, sueñen en grande, conviertan esos sueños en metas y trabajen por hacerlos realidad; nuestro futuro depende de las decisiones que tomemos en nuestro presente.
Te invito a invertir tu tiempo y energías en lo que realmente vale la pena y a cultivar la gratitud y cualquier hábito que sea saludable y necesario como una meta de año nuevo, pero sobre todo a vivir el momento presente porque el tiempo seguro que tenemos es el que estamos viviendo justo ahora.