11/15/2025
Si hay algo constante en la vida, es la incertidumbre. Nadie sabe lo que va a pasar.
El problema no es la incertidumbre. Es cómo la interpreta tu sistema nervioso.
Cuando no está autorregulado, la incertidumbre se vive como amenaza. Y cuando el cuerpo se siente amenazado, la mente se bloquea: procrastinas, te distraes, haces mil cosas… menos lo que realmente importa. El avance se nulifica.
Por eso es tan importante aprender a regresar al cuerpo.
Cuando te observes en ese estado alterado, donde quieres hacer demasiado, respira. Tranquilízate. Date un momento para que tu cuerpo pueda tomar esa incertidumbre y leerla como oportunidad, no como peligro.
La incertidumbre siempre está ahí. Lo que cambia es la interpretación.
Cuando vuelves al cuerpo, respiras profundo y te dices: “estoy a salvo, estoy en paz”, te vuelves más eficiente, más estructurada y avanzas más.
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¿Cómo se siente la incertidumbre en tu cuerpo? Te leo 👇