
16/06/2025
🌿 PEQUEÑAS EXPERIENCIAS de ALIVIO, REPETIDAS con ATENCIÓN, EMPIEZAN a VOLVERSE CAMINOS POSIBLES 🌿
El sistema nervioso guarda lo que percibe como significativo.
Eso incluye lo que dolió, lo que tensó, lo que asustó.
Las experiencias quedan grabadas: en la tensión muscular, en la postura, en la respiración.
Muchos de nuestros hábitos corporales se formaron así:
como respuestas inteligentes a momentos difíciles.
El cuerpo no olvida.
Pero también puede aprender.
Puede registrar otra clase de experiencia: como coherencia interna.
Para eso, no alcanza con corregir.
El sistema no se abre desde el esfuerzo, sino desde la seguridad.
Solo en un entorno que percibe como seguro,
puede relajarse, bajar la guardia y EXPLORAR lo nuevo.
Ahí entran los gestos amables, lentos, sostenidos, entra una posibilidad.
Una respiración que libera, un ajuste que alivia,
una postura que no exige pero organiza.
Eso, si se repite, se guarda.
Y al guardarse, aparece como opción.
No borra lo anterior,
pero se vuelve una alternativa viva, disponible, accesible.
Una ruta nueva en el mapa corporal.
Entonces: pequeñas experiencias de alivio, repetidas con atención,
empiezan a volverse caminos posibles.