07/05/2021
El último que apague la luz y cierre la puerta y es que hoy venimos de reflexiones a propósito de que se acerca el día de las madres...
El acto de dar a luz, sea como sea, no debe ser manchado con comparaciones y comentarios absurdos sobre "quién sufre más", "la que tarda más horas es más valiente" o sobre si "antes las mujeres parían y las de ahora son flojas".
El valor de una mujer no se mide por el dolor que puede tolerar, ya de por si, una mujer que decide ser madre es muy valiente por estar dispuesta a poner su vida, cuerpo y futuro a disposición de una personita que ni conoce.
Todo el mundo se siente el más moderno y mente abierta hasta que muchas veces se toca el tema de la maternidad y las decisiones propias de la mujer: te juzgan si tienes parto natural, si lo haces por cesárea, si te acompaña o no una doula, que si la epidural, que son malas si no dan lactancia materna exclusiva que son buenas si se reincorporan al trabajo de una vez. Jamás evolucionaremos como sociedad si se sigue juzgando el rol de la mujer y sus decisiones sobre la maternidad y cómo la ejercen.
Se confunde tanto la gimnasia con la magnesia que hasta ponen en duda nuestra profesión como obstetras. En este consultorio, estamos totalmente a favor de que cada vez más mujeres estén informadas y procuren evitar intervenciones médicas innecesarias pero como médicos hemos visto mujeres que han elegido parir naturalmente y a pesar de muchas horas de dolor y angustia, debe terminar en una cesárea, ¿es acaso esa una mujer que no sabe lo que es parir? ¿es acaso ese un médico que no sabe lo hace y elige no poner en riesgo dos vidas?
Ser madre es un acto tan puro que no merece ser manchado con prejuicios de ninguna índole.
¿Te ha tocado vivir algo de esto? Cuéntanos.