24/07/2017
LA ORACIÓN, LA SALUD, EL EQUILIBRIO Y LA SANACIÓN
(Por Jose Gregorio Bello P.)
La oración es nuestro intento de comunicarnos con el Ser Supremo, de vincularnos, de unirnos, con la verdad que trasciende los sentidos.
Con ella agradecemos, pedimos, alabamos o simplemente nos ponemos a entera disposición de ese Ser supremo en que decidimos confiar.
La actitud de quien ora es de entrega y confianza. Por ello, a veces basta con un simple sentimiento para entrar en oración.
Pero siempre las palabras nos han ayudado a comunicarnos, con nosotros mismos, con los demás y con aquel del que esperamos todos los bienes.
El poder de la oración es el de la palabra expresada con fe.
El poder de la oración se manifiesta en nosotros al confiar en ese ser que vive en nosotros y al cual dirigimos nuestros pensamientos.
A el Dador de toda vida va dirigida nuestra oración por la salud, la sanación y la abundancia.
La salud es el equilibrio mediante el cual nos relacionamos y desarrollamos en armonía con nosotros y con todo el universo que nos rodea.
Cuando pedimos sanación, nos referimos a la recuperación de ese estado de equilibrio, perdido momentáneamente.
En nosotros reside ese poder de restablecer nuestro equilibrio.
Pero debemos solicitarlo, con fe y confianza.
Si nuestros deseos están en armonía con el Plan Universal, la salud reinará en nosotros.
Pero recordemos que para pedir también debemos dar, y damos, pidiendo también por el resto del Universo.
El equilibrio perfecto, la salud perfecta, es la del todo el planeta, la de todos los seres vivos, la de todos y de todo lo que nos rodea.
Así nuestra propia salud será perfecta en armonía con todo el universo y permanecerá así en orden y en equilibrio.
Copilado por : Ing. Wilfredo Legonía wplegonia@gmail.com
