
21/04/2025
Nuevas evidencias de asentamientos de civilizaciones Ante Históricas en Andrés Eloy Blanco, Estado Sucre.
Por Otilio Rondón.
Cuando logramos hurgar en los más profundos cimientos de la ante historia, esto nos conduce al logro de la verdadera realidad oculta en lugares. Que para muchos no son de su interés y por lo tanto no significan nada para ellos.
Por eso hoy, nuestro punto de partida es un tema que debemos abordar desde una perspectiva transparente que nos debe llevar sin atajos a los verdaderos orígenes del pueblo de Casanay y sus alrededores. Para eso nos basamos en los hallazgos aparecidos en las concentraciones de cultura material ubicadas en la parroquia Mariño, del municipio Andrés Eloy Blanco, del estado Sucre. Estos materiales encontrados son una clave para la investigación y comprensión de las posibles civilizaciones ante históricas que se asentaron en este territorio en épocas pasadas.
Es por eso, aunque mucho lo ignoren, que desde el momento que comencé a conocer los documentos dejados por los españoles sobre los acontecimientos del pasado, he afirmado que esa historia tal como nos las han relatado es escasamente, parte de una realidad deformada y escamoteada por algún interés.
Por eso, cuando alguien me pregunta la razón de mi posición, por esa manera de pensar, le he contestado que esa deformación ha sido consecuencia del deseo reservado de poderes implantado a lo largo del tiempo desde la llegada de los europeos a nuestras tierras, y de aquellos que han sentido la necesidad de justificar sus actitudes dominadoras, recreando y transformando todos aquellos procesos que podrían contradecir sus pretendidos derechos oportunos de dominación.
Por ese camino, nos ha llevado a pensar que esa historia que conocemos como cierta y objetiva no puede ser otra cosa que un cúmulo de arreglos de claves manipuladas de razones defendidas ayer y hoy, con ejemplos cuidadosamente escogidos entre aquellos que vienen a demostrar y defender la actitud vital de quienes se alzaron con el poder y trataron de deformarla en razón indiscutida.
Ante esta posición, debemos poner a la vista de ustedes algunos materiales líticos que dan a demostrar que en el municipio Andrés Eloy Blanco, existió una cultura que dejó un legado, el cual debemos conocer, amar, preservar, defender y transmitir a las nuevas generaciones como un patrimonio identitario de nuestra verdadera historia.
Entre los materiales hallados en estas concentraciones de culturas material se pueden nombrar:
1. Una roca con ángulos perfectos que mide un metro con ochenta y cuatro centímetros de largo (1,84 cms), por un metro con cuarenta y siete centímetros de ancho (1,47 cms) y cincuenta y cinco centímetros de espesor (55 cms).
2. Una roca de 99 centímetros de ancho (99 cms), con una altura de cuarenta y cinco centímetros y medio (45,5 cms)y veinticinco centímetros (25 cms) de espesor.
3. Una roca de dos metros con setenta centímetros (2,70 cms) de ancho; con un metro con noventa centímetros (1,90 cm) de altura, y cuarenta y cuatro (44 cm) centímetros de espesor.
Pero la más significante es la aparición de una figura de 41 centímetros de altura, con un ancho de 23 centímetros, por 17 centímetros de espesor.
Esta figura a nuestro parecer representa un carácter ritualístico de expresión religiosa que es una herramienta utilizada como intermediaria entre los seres humanos y el mundo espiritual. Este elemento puede ser una clave para la comprensión de las prácticas religiosas y culturales de esta sociedad del pasado, la cual podría ofrecer información valiosa sobre sus creencias, rituales y cosmovisión.
Estos hallazgos indican que la historia de Casanay, no se inicia con la llegada de los europeos a nuestras tierras, sino que existe otra historia que contar. A tal efecto, esperamos los estudios científicos que ratifiquen nuestra posición.
Agradezco la colaboración en la búsqueda de estas concentraciones de culturas material en los últimos meses de Rafael Luis y Antonio Rondón.