27/04/2023
Hoy quiero hablar del cuerpo, sobre todo del mío.
Desde pequeña he sido una persona con sobrepeso, y en algunas ocasiones he llegado a padecer obesidad.
Hace un tiempo me sumergí en una de las experiencias más importantes de mi vida, en la que pude reconstruir mi relación con la comida, mi cuerpo y mis emociones; bajé mucho de peso, pero sobre todo, me sentía bien. Sin embargo, por diversas causas y circunstancias tuve que modificar muchos de los hábitos que había adquirido, y así mismo mi cuerpo fue modificándose al unísono.
Sentí culpa, vergüenza, sentí fracaso. Sin embargo, he ido logrando retomar actitudes que me van ayudando a entender que mi cuerpo se parecerá a lo que me pasa, a lo que siento, a lo que necesito, irá cambiando, y eso está bien.
Existen varias teorías sobre porqué el peso corporal puede alterarse, desde la genética, trastornos de la alimentación, influencias sociales y culturales, hasta trastornos de la afectividad. Según la pseudociencia de la biodescodificación el tejido adiposo funciona como una especie de protección, y su distribución tiene relación íntima con el conflicto que atraviese la persona, respondiendo a la percepción de un ataque o reponiendo simbólicamente alguna pérdida.
Viéndolo de esta manera, subir o bajar de peso es tan humano como sentir dolor, por eso, comparto está reflexión tan personal, para recordarme que mi cuerpo es mi casa, y será lo que yo sea. 💙